La UD Logroñés ya está en modo playoff. Le han sobrado un par de jornadas. Sin duda la última. En donde se medirá finalmente el sábado a las 18:30 horas al Utebo, sin nada en juego. Los tres puntos serán irrelevantes. Los riojanos tratarán de ascender como terceros, mientras que el Utebo lo intentará como cuarto del Grupo 2. La clasificación en la temporada regular es un elemento muy clave a la hora de iniciar este nuevo camino, el definitivo, hacia la única meta posible, cruzar hasta la Primera Federación.
Y dados los últimos cambios realizados por la Real Federación Española de Fútbol -de la pandemia a esta parte- conviene tener clara la normativa de esta nueva etapa antes de iniciarla. Así funciona el playoff de ascenso a Primera Federación. La UD Logroñés acabará tercera de su grupo, el 2. Por tanto, sabe que se medirá a un cuarto de los otros cuatro grupos. El sorteo se celebrará este próximo lunes a las 13:00 horas.
Terceros contra cuartos, mientras que los segundos clasificados se enfrentarán a los quintos. Nunca se pueden enfrentar, hasta donde sea posible, equipos del mismo grupo. El asunto final es repartir cinco nuevos ascensos a Primera Federación, que se sumarán a los cinco ascensos que logran los cinco primeros clasificados de cada uno de los cinco grupos que conforman esta Segunda Federación.
Se premia la mejor clasificación en temporada regular, tanto en las semifinales como en la gran final. Dos rondas, cuatro partidos, y siempre la vuelta se juega en casa del equipo mejor clasificado. Por tanto, la UD Logroñés, por ser tercera, jugará la vuelta de la semifinal en Las Gaunas. Y bajo ningún concepto esta ronda puede irse a la tanda de penaltis. En caso de empate, siempre pasa el equipo con una mejor clasificación durante la temporada. Es decir, el segundo, en caso de empate, gana al quinto; y la UD Logroñés, como tercera, en caso de empate ante el cuarto clasificado que le toque en suerte, superaría esta primera ronda.
Al contrario que en el playoff de ascenso de Primera Federación a Segunda División, en este peldaño inferior no se sortea todo el cuadro. Por tanto, el equipo de Diego Martínez no conocerá a su posible rival en la final hasta que no se despeje la ronda de semifinales. Aquí, la única certeza es que un segundo clasificado, si pasa, nunca se podrá enfrentar a otro segundo clasificado, porque el sorteo estará dirigido para que los segundos reciban a un tercero o a un cuarto que haya superado la ronda anterior. Por tanto, la UD Logroñés podría enfrentarse a un segundo. En este caso, los riojanos jugarían la vuelta fuera de Las Gaunas, y en caso de empate quedarían eliminados sin acudir a la tanda de penaltis.
Duelo entre terceros
Pero también se puede dar el caso quizás más complejo. Que la UD Logroñés juegue contra otro tercer clasificado. ¿Qué sucede entonces? ¿Quién juega la vuelta como local? ¿Quién pasa en caso de empate? Está previsto en la norma. De enfrentarse en la final dos equipos con la misma clasificación, la ida se jugará siempre en casa del equipo cuya bola haya sido extraía antes de la correspondiente copa. La vuelta, lógicamente, la jugaría fuera de casa. Y en caso de que persistiera el empate tras los noventa minutos, se jugaría la prórroga. De no resolverse a favor de ningún equipo, entonces, sí, habría que acudir al punto de penaltis, para lanzar cinco penas máximas por equipo, para saber quién celebra el ascenso a Primera Federación.
