Los planes de 941

Rincón de Soto se prepara para su tradicional feria equina

Todo está preparado para volver a celebrar, este jueves, uno de los días más importantes del calendario rinconero: la feria del ganado. Durante todo el fin de semana, Rincón de Soto ha celebrado sus fiestas de la Juventud con infinidad de actividades y casi sin tiempo para recuperarse desde este miércoles se adentran en una de las festividades más tradicionales del municipio.

Este miércoles por la tarde se celebrará el pregón anunciador, que este año corre a cargo de la cuadrilla La Trampilla. El jueves, desde bien temprano, se abrirá el gran ferial de ganado equino, una de las pocas ferias de tratantes que perduran con el paso de los años en el norte del país y que reúne cada año a cientos de personas que disfrutan de los tratos para disfrutar de una jornada en la que el sorteo de ‘la cagada del buey’ y un encierro protagonizan los actos de la tarde.

Las primeras ferias de ganado se remontan en Rincón de Soto a finales del s. XIX. Los documentos históricos datan la primera Feria en 1894, impulsada por el entonces alcalde, Francisco Llorente. 130 años celebrándose de forma casi ininterrumpida. Desde su primera convocatoria la feria gozó de un éxito inesperado, al concentrar a centenares de ganaderos provenientes de todas las regiones del norte peninsular. No cabe duda, que a ello contribuyó la buena situación geográfica de la localidad, vinculado a los buenos sistemas de transporte para le época.

Los más mayores del municipio todavía recuerdan como los días previos a la Feria, solían llegar cantidades de caballos y demás equinos provenientes de cualquier zona con el objetivo de buscar corrales donde poder dejar a su ganado con el fin de descansar, tras un largo camino.

La mayor parte de las casas del pueblo en aquel entonces disponían de cuadras que preparaban y alquilaban a cambio de poder resguardar el ganado que se iba a destinar a la venta. Por otra parte, suponía un recurso económico bienvenido especialmente en los años más duros de la dictadura, momentos en los que “a pesar de la penuria reinante la feria continuó celebrándose”, cuenta Guillermo Martínez en uno de sus textos dedicados a la feria.

Pero es en estos tratos donde reside el mayor encanto de la feria. Llama la atención, aún a día de hoy, los tratos que realizan unos ganaderos con otros. Las transacciones y la compra-venta de ganado han ido reduciéndose con el paso de los años. Desde hace años ya son pocos los burros, asnos, mulas o, incluso, percherones destinados para labores agrícolas o de arrastre que pueden verse en la feria, y cada vez más numerosos los ejemplares de monta.

Aún así la fiesta no se pierde y con el objetivo de mantener la tradición, los vecinos siguen participando en masa en una fiesta para recordar la importancia que tuvo antaño.

Fin de semana de jotas

Los actos festivos se alargarán hasta el fin de semana con la celebración del 24 certamen de Jotas Antonio García. Las primeras jotas comenzarán a sonar a partir de las 11.30 de la mañana. Además no faltará el ya consolidado concurso de paellas y no faltará un concierto de versiones por la noche y carpa joven a lo largo de la madrugada.

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