El director general de Cultura, Roberto Iturriaga, y el director de la Biblioteca de La Rioja, Josu Rodríguez, han desgranado los detalles de la exposición ‘LO 1958-1979. Veinte años de Depósito Legal en La Rioja’, que acoge la biblioteca regional desde este lunes y hasta el próximo 24 de junio. Una exposición que propone un recorrido a través de una selección de materiales gráficos y folletos que forman parte del patrimonio bibliográfico español y riojano que se conservan a través del Depósito Legal de La Rioja en una cita que invita, como ha destacado Iturriaga, “a un viaje intergeneracional donde las niñas y los niños pueden venir con los abuelos o sus padres a ver cómo se vivía en La Rioja en aquellos años”.
Es la Biblioteca de La Rioja el centro de conservación del patrimonio bibliográfico de referencia de la región y el destino en el que se conservan y se preservan para el futuro los ejemplares recogidos en el Depósito Legal. En la actualidad, como ha confirmado Rodríguez, “el Depósito Legal de La Rioja recoge cada año unos 2.000 números entre carteles o publicaciones, en una tarea costosa y de la que a veces los editores no son conscientes del significado que tiene depositar sus publicaciones, una labor que ahora nos permite ver la historia cercana de La Rioja”.
La exposición recoge “una pequeña selección de esta historia” a través de unas 200 piezas, entre carteles y material menor, algunas de las imágenes sobre deporte, publicidad, religión, cultual o política que la sociedad riojana pudo ver por las calles a lo largo de veinte años y que forma parte de la memoria colectiva. Más de veinte imprentas de la época quedan representadas en esta exposición cuyos materiales, tras finalizar la muestra, se digitalizarán y se incluirán en la Biblioteca Virtual de La Rioja.
Como se destaca en la exposición, “adentrarse en el Depósito Legal es dar un salto en el tiempo, un viaje al pasado, acceder a un lugar donde estos tesoros son meticulosamente custodiados”. Una oportunidad para que los visitantes se embarquen en un viaje “que no nos dejará indiferentes con imágenes y textos que van más allá del objetivo informativo, seductor y visual con el que fueron diseñados. Una oportunidad para recuperar la memoria de lugares, fiestas, negocios, productos y tendencias de épocas pasadas, así como para reflexionar sobre la evolución y los cambios que se han producido en el diseño de carteles y otros materiales gráficos, sobre su presente y futuro, donde esperamos que esta forma de expresión pueda seguir siendo valorada y preservada”, ha apuntado el Director General de Cultura.
A través de carteles y folletos, la exposición propone un viaje por la diversión y tradición de los años sesenta y setenta de La Rioja con material gráfico de los bailes de debutantes, los de disfraces, los concursos de twist o jotas, las Fiestas de la Vendimia o la obligada cita al Cine Club Universitario. Un tiempo en el que los eventos y actividades para promover la espiritualidad eran numerosos con carteles sobre las sesiones de Adoración Nocturna, el Día de las Vocaciones o el de la Caridad. En la sección que la exposición le dedica al deporte, se puede disfrutar de una gran cantidad de carteles convocando a diversos campeonatos y actividades deportivas de disciplinas como el boxeo, la pelota o los rallyes.
Los visitantes también podrán disfrutar de los primeros carteles políticos de los años setenta y rememorar la pujanza de algunas marcas comerciales que tenían su origen o estaban ubicadas en nuestra región como Licor del Polo, Lázaro, Marbú, Pingouin Esmeralda o Rodier, entre otras. Una selección que también permite observar la solidez y la buena salud del sector gráfico riojano, con imprentas que elaboraban carteles publicitarios de marcas nacionales como Colgate, Philips o Panten.
La muestra se podrá visitar en la sala de exposiciones de la Biblioteca de La Rioja hasta el 24 de junio, de lunes a domingo de 11:30 horas a 13:30 horas y de 18:00 a 20:30 horas.
El Depósito Legal de La Rioja, testigo y guardián del patrimonio bibliográfico
Desde 1958 los impresores, primero de la provincia de Logroño y luego de la Comunidad Autónoma de La Rioja tienen que solicitar autorización previamente a la difusión de la publicación. Se le asigna un número de depósito legal que deberán constar en cada uno de los materiales que se vayan difundir públicamente. Un número compuesto por las iniciales de la provincia de Logroño, un número correlativo y el año, por ejemplo, LO-231-1960.
Es en noviembre de 1980 cuando se produce el cambio de denominación de la provincia de Logroño por la de La Rioja afectando también a la identificación del número del depósito legal. Posteriormente, en 2011, una modificación normativa trasladó también a los editores la obligación de depositar los ejemplares de las publicaciones de todo tipo, reproducidas en cualquier soporte y por cualquier procedimiento para su distribución o comunicación pública.
El depósito legal es un instrumento fundamental para la conservación del patrimonio bibliográfico y cultural del país, preservando la memoria colectiva; facilitando la investigación y el acceso a la información; difundiendo la cultura española; y realizando un seguimiento de la producción editorial, facilitando así la elaboración de estadísticas y estudios sobre el sector.
En concreto, el depósito legal en La Rioja tiene una importancia similar al ámbito nacional, con la particularidad de contribuir a la preservación del patrimonio cultural riojano. Es la Biblioteca de La Rioja, como depositaria del depósito, la encargada derecibir y custodiar los ejemplares de las publicaciones riojanas; organizar y catalogar los ejemplares depositados; poner a disposición de los usuarios los ejemplares depositados; y difundir la producción editorial riojana. Un recurso al que en la actualidad se puede acceder a través de la página web www.depositolegal.larioja.org
