Las primeras lagrimillas ya están cayendo y los estornudos recurrentes comienzan a interrumpir más de una conversación. ‘¡Malditas pelusas!’. Parecen pequeñas gotas de algodón que ya cubren de blanco parques y jardines de La Rioja y son producidas por plantas del género Populus, chopos o álamos.
Pero, amigos, ese ‘algodón’ no es el causante de la alergia como tal, es simplemente el método que tiene el chopo o el álamo para esparcir sus semillas. Y aunque estas semillas no sean las causantes de tus estornudos, pueden arrastrar otros pólenes que sí lo hacen.
Precisamente, las temperaturas altas y lluvias intensas en el mes de marzo son el caldo de cultivo perfecto para que los alérgicos lo pasen mal esta primavera. Es más, según la alergóloga en el Hospital San Pedro de Logroño, Idoia González, “las alergias esta primavera van a ser más persistentes”.
Pero volviendo a las pequeñas ‘gotas de algodón’, una vez ya estigmatizadas por todos, su único peligro es la gran capacidad que tienen para arder, como ya hemos visto en más de una ocasión. Y por cierto, su nombre correcto es vilano.
