Es el germen del municipio, donde se instalaron las primeras viviendas de la localidad, pero el paso del tiempo y el nuevo desarrollo urbano a espaldas de la zona han convertido al Barrio de Arriba en Albelda en un lugar complicado para vivir. Los últimos casos de violencia en la zona además no le hacen ningún favor a la zona pero el Ayuntamiento no quiere quedarse de brazos cruzados y tiene la intención de intervenir en él para llevar a cabo su rehabilitación, no sólo urbanística si no también social.
Sergio Ochagavía es el alcalde del municipio. La intención a corto plazo es invertir en una primera fase en torno a medio millón de euros. “La primera intención es actuar en ocho calles, allí hay varias casas declaradas en ruinas y siete con expedientes ya iniciados”. Los solares de algunas de ellas se han convertido en auténticos vertederos. “Pero otras casas están en muy buen estado y a esas familias tenemos que procurarles los mismos servicios que al resto de los vecinos”.
Habrá derribos para convertir esas zonas en aparcamientos para los vecinos pero también ese dinero se va a invertir en mejorar las redes de sanemamiento y distribución, el pavimento… “Uno de los objetivos es evitar las fugas de agua que son constantes y que nos aparecen donde menos nos lo esperamos”.
La idea es darle un lavado de cara al barrio. “Hay que cambiar las redes de saneamiento porque son muy antiguas y tenemos casi 4 kilómetros de fibrocemento”. La idea no es otra que “los vecinos de esta zona puedan tener los mismos servicios que el resto, como los hidrantes de riego que en esa zona son inexistentes y nos podemos encontrar con un problema cuando haya un incendio”.
Y es que lo que quiere el Consistorio es dignificar y revitalizar la zona. “Después de eso habrá además más seguridad porque en una segunda fase vamos a meternos con el tema de los derribos y la mejora de la iluminación”.
