El Náxara ha vencido al Gernika (2-1), en su intento por aferrarse a la Segunda Federación. Gracias a un doblete de Miguel Pérez en la primera parte y un insuficiente tanto vasco en la segunda, los blanquiazules se colocan con 21 puntos. Siguen penúltimos, ahora a nueve del playoff de permanencia (Arenas de Getxo, 30) y a doce de la salvación (Mutilvera, 33), a falta de dieciocho en juego. La permanencia sigue siendo una tarea muy difícil, pero hasta que las matemáticas digan lo contrario, hay vida. Quinta victoria de la temporada, todas ellas en La Salera. Y alegría también, en este Domingo de Ramos, para un Josean García que celebró su cumpleaños durante esta semana.
El propio técnico ha saltado al campo con Víctor Pradas en portería, Dani Hernández, Viti, Juan y Mikel Córdoba en defensa; Álex Merino y Miguel en la medular, con Miguel Pérez y Sotelo desplegados por las bandas y arriba, Orodea y Marcos Sotelo. Si algo ha demostrado este entrenador es confianza en sus piezas clave. Hasta la muerte (deportiva), hasta la última batalla, la columna vertebral se mantiene. Constancia en un equipo que ha competido durante toda la campaña y al que el fútbol le ha devuelto un poco de lo que le debía en estas últimas jornadas.
La mejoría de los najerinos es indiscutible y para muestra, el hecho de que sus tres últimos partidos como local hayan concluido con victoria y sin encajar goles en contra. Con ese panorama, su próxima cita al colista Brea en el Sábado de Pasión, a partir de las cuatro de la tarde. Solo le vale una victoria ante el último clasificado, para seguir llevando la contraria a las matemáticas y reducir la distancia al final del Domingo de Resurrección.
