El Barcelona se ha desquitado de su reciente derrota en Alemania con una clara victoria en Logroño, por 24-30, en un partido muy serio en el que no ha hecho ninguna concesión a un rival que ha competido bien, a su nivel, y que en el segundo tiempo peleó por hacer un buen papel, pero que nunca ha tenido opciones.
El Logroño es uno de los equipos que más ha complicado los partidos en España que ambos han disputado este año y, por eso, el Barcelona llegaba avisado y se ha mantenido muy serio desde el inicio, con lo que pronto ha puesto una diferencia a su favor que le ha bastado para ganar. El buen inicio defensivo del Barcelona ha puesto en muchas dificultades al Logroño, que solo ha anotado un gol en diez minutos; los riojanos defendían bien y, de hecho, solo encajaron 4, pero su producción era muy pequeña para inquietar al líder.
Así, poco a poco el Barcelona fue activándose más y el Logroño tardó mucho en soltarse en el partido (2-8 al cuarto de hora) y siguió con problemas para anotar (3 goles en 20 minutos) con lo que todo su esfuerzo defensivo se quedaba en nada. Un esfuerzo, que, en realidad, tampoco le servía de mucho, dado que aunque a veces el Barcelona necesitaba “mascar” sus jugadas más de lo que le gusta, en general hizo gala de una gran efectividad y apenas falló cuatro de sus lanzamientos en todo el primer tiempo, que terminó con un 10-16 más “corto” de lo que se esperaba por el inicio de los locales.
El segundo tiempo fue otra cosa, en parte porque los dos equipos admitían ya quien sería el ganador; pero sin esa presión, el Logroño jugó mejor y el Barcelona tuvo minutos de indolencia y solo las intervenciones de Nielsen en la portería impidieron que el marcador se apretara más. El Logroño dio un paso adelante en agresividad, tanto en defensa como en ataque y gracias a ello pronto redujo las distancias (14-18) aunque la remontada no fue a más porque el Barcelona, cuando se vio con un jugador más en la pista, fue muy efectivo, liderado por Dika Men y Richardson.
De nuevo creció la diferencia (14-21), pero de nuevo el Barcelona se paró y dio pie a que el Logroño regresara al choque (20-24) a menos de diez minutos para acabar, en lo que solo las paradas de Nielsen terminaron de desilusionar a los riojanos, que se entregaron poco después para terminar con la misma desventaja que tenían al descanso, seis goles (24-30).
Ficha:
24.- Logroño La Rioja (10+14): Palasics (p), Xavi Tua (2), Eduardo Cadarso (1), David Cadarso (6, 5p), Uríos (2), Palomino (2), Zaja, Xoan Ledo (p), Rivero (3), Martí Soler, Preciado (3), El Korchi (3), Modi (1), Alves Ponciano (1) y Javi García
30.- FC. Barcelona (16+14): Pérez de Vargas (p), Ariño (3), Carlsborgard (2). N’Guessan (5), Javi Rodríguez (5), Men (3), Richardsson (4, 2p), Emil Nielsen (p), Wanne (3), Janc (3), Aleix Gómez, Petrus, Luis Frade (2) y Cikusa.
Parciales: 1-3, 1-4, 2-8, 3-12, 8-15, 10-16 (descanso), 11-18, 14-19, 15-23, 20-24, 22-28 y 24-30 (final).
Árbitras: Tania Rodríguez y Lorena García. Excluyeron por dos minutos al local Juan Palomino (en dos ocasiones) y al entrenador Miguel Ángel Velasco; y del Barcelona a Aleix Gómez y Cikusa.
Incidencias: Más de dos mil espectadores en el Palacio de los Deportes de La Rioja.
