Nos conocimos en el Espolón, hace ya unos cuantos años. Él estaba pintando del natural los jardines de dicho paseo con el reloj de la ‘Aurora’ al fondo. No es normal ver a pintores al aire libre pintar del natural, yo creo que era la primera vez que veía un caballete plantado en medio del Espolón, así que me acerqué y le saludé, no sin cierta precaución.
Hay artistas a los que no les gustan los curiosos y sobre todo que venga el aficionado de turno e intente corregirles el cuadro. Le dije que yo también pintaba y que me parecía precioso el cuadro que estaba realizando. Enseguida entablamos una conversación, y una relación de amistad que ha durado a través del tiempo. Unos años mas tarde, en 1995, Javier Pascual, director de la revista ‘La Prensa del Rioja’, para celebrar el décimo aniversario, decide editar un libro con 25 artistas riojanos y una magna exposición en la sala de Caja Rioja-Gran Vía de Logroño, para lo que cuenta con mi colaboración en el diseño del mismo y la producción artística.
Según reza en el libro fue editado con “la colaboración del Consejo Regulador de la Denominación Calificada Rioja, así como de los pintores que aparecen en el libro”. Y ahí volvimos a coincidir, dado que fue uno de los artistas seleccionados, José Ignacio Amelivia trajo para el mencionado proyecto un impresionante cuadro que representaba un vendimiador con un corquete en una mano y un cunacho en la otra. Desde entonces hemos mantenido una cordial amistad, dado que además nuestros estudios están a unos 200 metros de distancia. Además, hemos coincidido numerosas veces en la Galería de Arte de nuestro querido y recordado amigo José Antonio Aguado, entablando animadas charlas sobre la pintura, el arte y los artistas.
Hasta el 24 de noviembre en la sala de exposiciones Ibercaja podemos ver una impresionante exposición de la obra de José Ignacio Amelivia. La exposición bajo el título de ‘Vértices emocionales’ es una muestra de la obra más reciente del pintor y podrá visitarse, de lunes a sábado, en horario de 18.30 a 21.00 horas, con entrada libre.
Amelivia se licencia en Geología, pero cada vez más fuerte siente la inclinación hacia el dibujo y la pintura. En 1982 gana el premio ‘Artium de dibujo’ y en 1983 ingresa en la facultad de Bellas Artes de San Fernando de Madrid, licenciándose en la especialidad de pintura. Su obra abarca técnicas como el óleo, acrílico y acuarela. Con pincelada suelta y paleta colorista y amplia, toca diversos motivos, aunque su tema dominante es el paisaje. La factura de sus obras, de técnica figurativa muy cuidada, muestran composiciones abiertas, realizadas con una pincelada impresionista, en las que el color y sobre todo la luz son los rasgos más acusados.
Espacios amplios, muchas veces vacíos de presencia humana, frecuentemente con potentes estructuras geológicas en donde se intuye la importancia que el autor otorga a una naturaleza virgen, que se erige como la auténtica protagonista de su obra. La exposición reúne una cuidada selección de su obra, con paisajes riojanos y playas y acantilados asturianos. Sus pinturas, que cuentan con una técnica figurativa muy cuidada, muestran composiciones abiertas realizadas con una pincelada impresionista. Sin duda alguna una gran exposición por su belleza y calidad.
Ha realizado más de treinta exposiciones individuales en salas de Madrid, Sevilla, Pamplona, Vitoria, Logroño, Oviedo, Cantabria, Aragón, Albacete, etc. y ha participado en gran número de exposiciones colectivas nacionales, muestras internacionales y ferias de arte. Seleccionado en muchos certámenes ha obtenido más de doscientos premios en concursos de ámbito nacional e internacional. Su obra se encuentra representada en instituciones oficiales de La Rioja, en ayuntamientos e instituciones de toda España, así como en muchas colecciones particulares. Aparecen referencias a su obra en publicaciones editadas por organismos oficiales, tanto en La Rioja como a nivel nacional. Es asiduo a concursos de pintura rápida donde ha obtenido numerosos premios.
