La asociación juvenil de UGT, RUGE La Rioja, ha presentado este lunes su informe ‘Juventud y Empleo 2023’, en el que radiografía la situación sociolaboral de los jóvenes riojanos y analiza su evolución tomando en cuenta algunos de los principales factores económicos y sociales que influyen entre los menores de 30 años.
Entre las principales conclusiones del informe, expuestas por su secretaria de Organización, Nuria Larrinaga, y el secretario de Acción Sindical, Enrique Ovejas, destaca el impacto positivo que la reforma laboral ha tenido entre este colectivo, con una notable reducción de la temporalidad se laboral entre los jóvenes riojanos. Así, mientras en 2021 sólo el 7 por ciento de los contratos firmados por jóvenes eran indefinidos, en lo que va de año, se encuentran en una media del 31 por ciento (datos hasta septiembre).
Es decir, la reforma laboral ha favorecido un impulso de la contratación indefinida del 24 por ciento entre los jóvenes riojanos al tiempo que la subida del SMI ha reducido la pérdida de poder adquisitivo, si bien son muchas otras las demandas de la juventud, no tan ligadas al salario, sino con la parcialidad, la conciliación y la mayor vigilancia de la Seguridad y la Salud en el Trabajo.
Por otro lado, RUGE se refiere en su informe a la subida del SMI que, a la vista de los datos, ha beneficiado principalmente a personas ocupadas de entre 16 y 34 años, con contrato temporal y que trabaja en el sector servicios, concretamente en la hostelería.
En términos salariales globales, el informe también desvela una evolución muy positiva de los salarios entre los jóvenes, que durante los últimos años han pasado de estar por debajo de la media nacional a superarla, con una ganancia media anual 1,6 puntos por encima.
Brecha de género
En cuanto a brecha de género en materia de desempleo, según la estadística del Servicio Estatal de Empleo analizada en el informe, La Rioja cuenta actualmente con 861 parados menores de 25 años, en proporción similar entre géneros (425 hombres y 436 mujeres), y 835 parados de entre 25 a 29 años, donde ya comienza a observarse un incremento de esta brecha (363 hombres y 472 mujeres) que se dispara a medida que la edad avanza.
Analizando los sectores que aglutinan la mayor parte de la ocupación entre los jóvenes, pese a la recuperación en el empleo para el conjunto de las trabajadoras y los trabajadores riojanos, muchas personas jóvenes han tenido que cambiar de sector en busca de oportunidades de empleo, migrando al sector Servicios. Las ramas de actividad donde más personas jóvenes trabajan son la hostelería y el comercio, la mitad de los y las jóvenes ocupados/as y una de cada tres mujeres jóvenes, seguido por la industria. De hecho, 9 de cada 10 jóvenes están ocupados en el sector servicios y en la industria.
Por otro lado, RUGE Rioja destaca que los empleos precarios son aquellos en los que la jornada que se realiza es una jornada parcial no deseada. De hecho, la EPA muestra como del total de personas jóvenes ocupadas, un 73,4 por ciento, trabaja a tiempo completo y un 27,6 % trabaja en jornada parcial, de los cuales sólo el 9% desea el contrato parcial.
El informe dedica un apartado especial a la salud mental; una problemática en auge entre las personas de menor edad para las que RUGE insta a dedicar una especial atención, con planes específicos para la identificación, evaluación y prevención de los riesgos psicosociales en actividades con mayor prevalencia de actividades mentales, entre otras actuaciones. De igual forma, insta a las empresas a que acrediten buenas prácticas en el manejo de la salud emocional y a la actualización en materia de riesgos psicosociales de la Ley de Prevención de Riesgos Laborales, del año 1995.
Además, RUGE llama a tomar medidas para poner freno a la desigualdad entre las nuevas generaciones, e impulsar planes específicos para mejorar la capacitación de las mujeres, tanto en áreas rurales como urbanas en ámbitos como el digital, el tecnológico, el emprendimiento, la economía social, el aprovechamiento forestal y agrario, actividades comerciales online o apoyo a actividades a la dependencia. De igual modo, considera que las Administraciones deben estimular la empleabilidad entre las personas jóvenes incidiendo dentro del marco de Diálogo Social en cuestiones pendientes de la Reforma Laboral, como el contrato relevo y la jubilación parcial como instrumentos para la renovación de plantillas.
Por otro lado, para RUGE Rioja, el Servicio Público Estatal de Empleo, de la mano con las comunidades autónomas, deben poner en marcha políticas activas de empleo, con orientadores laborales profesionales capaces de ofrecer inserción en el empleo.
Por último, RUGE Rioja desmiente una supuesta generalización de ‘ninis’ entre los jóvenes riojanos. “No somos unos vagos, queremos trabajar; pero no podemos perder de vista la creencia común entre el colectivo joven de que, para llegar a conseguir un trabajo estable y bien remunerado, primero deben pasar por multitud de empleos temporales y mal pagados. Es muy grave, y algo que nos debe hacer reflexionar, el hecho de que la población joven tenga asumida la precariedad”, concluye.
