El Gobierno de La Rioja destina 9,8 millones de euros, más de 300 profesionales y un completo equipamiento técnico para afrontar la temporada de alto riesgo de incendios forestales, que se activó a principios de julio y que se extenderá hasta el próximo 15 de octubre.
El presidente del Ejecutivo regional, Gonzalo Capellán; la delegada del Gobierno en La Rioja, Beatriz Arraiz; y la consejera de Medio Ambiente, Noemí Manzanos, han visitado este viernes la base de medios aéreos contra incendios forestales de Agoncillo, que forma parte del dispositivo previsto para afrontar la temporada de alto riesgo de incendios forestales.
También han asistido a una demostración de embarque en la aeronave por parte de la Cuadrilla de Acción Rápida en Incendios Forestales (CARIF), ha detallado el Gobierno regional.
De los 9,8 millones de euros destinados este año a la actuación contra los incendios, 5,4 son para tareas de prevención y 4,4 para las de extinción de incendios. Esta partida global se ha incrementado este año por la adquisición de más medios técnicos, como dos autobombas, una nave en Santurde y trece vehículos.
Durante el verano, La Rioja cuenta con más de 300 efectivos especializados, formados, preparados y coordinados para responder frente a los sucesos provocados por el fuego. Entre ellos, figuran agentes forestales, bomberos forestales, técnicos de la Dirección General de Medio Natural y Paisaje, personal de medios aéreos, CEIS Rioja, medios del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO), Guardia Civil, Protección Civil y la Unidad Militar de Emergencia (UME).
La Rioja, para detectar los primeros focos de incendio, dispone de 15 torretas de vigilancia fija, instaladas en zonas estratégicas de la región con mayor alcance visual y que son pieza clave en la detección del fuego. Ello se complementa con 18 cámaras accionadas por control remoto, que permiten observar y vigilar amplias zonas y puntos muertos; situadas en zonas estratégicas y se se empezarán a utilizar este año en fase de pruebas.
La comunidad riojana dispone de un helicóptero Bell-412, que ofrece apoyo a la CARIF y, que, además de la labor preferente de extinción de incendios forestales, puede realizar otros trabajos relacionados con el medio natural, como tareas de vigilancia y prevención.
Además, el Ministerio aporta dos aviones de carga en tierra AT-802 y su personal asociado; y, como novedad, ese año incorpora, con ubicación en La Rioja, el equipo de la Unidad Móvil de Análisis y Planificación (UMAP) y el Equipo de Prevención y Análisis de Incendios Forestales (EPAIF).
En el dispositivo está incorporado un sistema de seguimiento GPS de recursos humanos, que permite realizar planificación de tiempos presenciales en la emergencia de incendios forestales.
Extremar la precaución
Capellán ha resaltado “la importante labor que se lleva a cabo por parte del dispositivo y que velan durante todo el año por nuestro rico patrimonio natural”, pero, “en especial, en estas fechas de mayor riesgo, en las que más de 300 personas trabajan para responder de inmediato ante cualquier siniestro provocado por el fuego”.
Ha incidido en la necesidad de extremar las medidas de precaución y respetar la normativa vigente, tanto en el plano de las actividades lúdicas como en el de las tareas agrícolas, para evitar siniestros.
Capellán ha apelado al compromiso ciudadano para, entre todos, “minimizar riesgos y colaborar, tanto en la prevención como, en caso de producirse un incendio, en la detección temprana avisando con celeridad al 112”.
También ha aplaudido la coordinación entre las distintas dotaciones y administraciones que componen el dispositivo en La Rioja, en el que colabora el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente con dos aviones de carga en tierra, entre otros medios.
Por su parte, Arraiz, en una nota, ha destacado que el MITECO despliega una serie de medios por toda España para asegurar esa función de apoyo a las comunidades autónomas en labores de extinción y prevención.
“Dichos medios son de cobertura nacional, es decir, no están adscritos al lugar donde se ubican, sino que podrán actuar en cualquier punto del territorio donde sean necesarios”, ha indicado la delegada, para quien es “un orgullo para La Rioja contar con magníficos profesionales, quienes demuestran su gran trabajo sobre el terreno verano tras verano”.
Casi 200 hectáreas calcinadas el pasado año
Los datos del Gobierno de La Rioja indican que, el año pasado, se produjeron 89 incendios, que afectaron a 195,46 hectáreas de superficie forestal, de las que 98,77 eran arboladas.
La media de superficie forestal quemada por incendio es significativamente menor respecto al periodo comprendido entre 2012 y 2021.
El 30 % de los siniestros se registraron en febrero y el producido en la sierra de Yerga (Alfaro), en julio, afectó a 90,37 hectáreas, casi el 50 % de la superficie forestal quemada en el año.
