El Gobierno de La Rioja ya tiene sobre su mesa la factura de las tormentas que inundaron la comunidad a finales de junio y principios de julio. Los frentes, que se cebaron especialmente con Huércanos, primero; y Rincón de Soto, después, causaron daños por valor de 6,3 millones de euros.
Así lo ha anunciado este miércoles el Ejecutivo regional, que ya ha activado el procedimiento para reclamar al Gobierno de España la declaración de zona afectada gravemente por una emergencia -lo que hasta hace poco se conocía como ‘zona catastrófica’- en un total de 72 municipios de la comunidad (casi la mitad del territorio).
Coche bañado en barro tras las tormentas en Huércanos.
El consejero de Política Local, Daniel Osés, ha recordado que la Administración autonómica extendió hasta el pasado lunes el plazo para que los Ayuntamientos de las localidades afectadas por las tormentas pudieran trasladar una evaluación de daños, que se centran especialmente en caminos agrícolas pero también dejaron huella en centros de salud y colegios.
Osés se ha comprometido a “llevar a cabo todos los trámites necesarios” para agilizar el pago de las ayudas y ha avanzado que el Ejecutivo riojano valora la posibilidad de anticipar las compensaciones con carácter de urgencia para que los agricultores de las zonas afectadas no tengan que esperar al abono del Estado y puedan acceder a sus cultivos para faenarlos.
