Como si de su particular San Fermín se tratase, Calahorra ha estado estos últimos días haciendo una cuenta atrás mental a la espera de que este miércoles comiencen los primeros actos de Holika. Cientos de horas de preparación a lo largo de los últimos meses concretados en las últimas semanas y días para que el miércoles por la noche (de forma extraoficial) y el jueves por la tarde (ya oficialmente) empiecen a sonar las decenas de horas de música previstas.
La experiencia del año pasado dejó a los calagurritanos con buen sabor de boca (a pesar de los miedos iniciales) y, esta vez sí, todo el mundo está implicado con cuatro días especiales que volverán a llenar la ciudad de jóvenes llegados desde los cuatro puntos cardinales del territorio nacional. Veinte mil por día hasta un total de ochenta mil que convivirán entre concierto y concierto en una acampada que pretende ser el hogar de unos 7.500 chavales durante estos cuatro días y que, como sucediese el año pasado, se dejarán ver por la ciudad en un ir y venir que modificará el día a día de la capital riojabajeña.
Sin tiempo casi a parar de bailar desde primera hora de la tarde hasta cuando los primeros rayos de sol empiecen a asomar al día siguiente, al aparcamiento de la Catedral será el kilómetro cero de la fiesta. Un escenario de enormes dimensiones, pantallas gigantes, zonas de barras, de gastronomía, una zona VIP y un sin fin de servicios para que nada les falte y su única preocupación sea la diversión.
El cartel ya lleva confeccionado meses. A falta del artista sorpresa que está vez será el encargado de abrir el evento, serán artistas nacionales e internacionales los que se suban a alguno de los muchos escenarios que este año tiene previstos la organización, que como novedad ha acercado el festival al municipio con actividades paralelas en diferentes puntos de la cartografía calagurritana.
Todo comenzará este miércoles con la presencia de Lit Killah en uno de los escenarios de la acampada (Intercatia) pero con entrada libre a todo el que quiera pasarse por allí . Un inicio que pretende dejar buen sabor de boca a los chavales que vayan llegando desde priemras horas de la mañana y para los muchos jóvenes calagurritanos que serán los mejores anfitriones de la ciudad durante las cuatro jornadas.
El jueves por la tarde se dará el pistoletazo de salida oficial. Al artista sorpresa le seguirán Eladio Carrión, Mora o los djs Alex Martini y José de las Heras, entre otros. Justin Quiles, Chimbala o Pole. están previstos entre otra veintena de artistas para el viernes y Reas B, Tokischa, Emilia o Ryan Castro podrán punto y final en la jornada de sábado.
Cifras astronómicas como los 2,6 millones de euros de presupuesto por parte de Burcor, la empresa encargada de la organización con la colaboración del ayuntamiento de Calahorra. Prácticamente el doble que lo invertido el año anterior. Y es que Mario Cornago, gerente del evento, quiere que este V aniversario (segundo que se celebra en la ciudad) sea algo especial.
Todo está a punto ya gracias al trabajo de algunos de los 700 empleados que han dado forma a Holika. Montadores estos primeros días a los que se sumarán personal de seguridad interna, camareros, cocineros y un sin fin de personas que tampoco descansarán los cuatro días de festival.
A ellos hay que sumar el dispositivo organizado por Guardia Civil y que contará con la colaboración de la Policía Local de Calahorra. Así, está previsto un macrooperativo compuesto por 630 efectivos de diferentes especialidades de la Guardia Civil, que velarán, del 28 de junio al 2 de julio, por la seguridad en Calahorra.
En concreto, acudirán agentes pertenecientes a las unidades de seguridad ciudadana y tráfico, policía judicial, servicio de información, agentes especializados en antiterrorismo y explosivos, agrupación de reserva y seguridad, servicio cinológico con perros detectores de drogas, seprona y la unidad de drones y anti-drones.
En definitiva, el instituto armado desplegará todos los medios materiales y humanos para que el festival se desarrolle con total normalidad y, para garantizar, junto a policía local, bomberos, protección civil y servicios sanitarios la seguridad de los chavales que lleguen al festival con el propósito de que éste se salde sin incidentes graves, como ya sucediese el año pasado.
De momento, la Guardia Civil ya ha hecho buena parte de su trabajo previo. Y este mismo martes se ha conocido el doble operativo de la Guardia Civil que se llevó a cabo la semana pasada en Calahorra y que se ha saldado con la intervención de 18.000 dosis de speed, casi dos kilos de marihuana, 20.000 euros en efectivos y un amplio lote de armas y munición real, entre otros efectos, que tenían como destino final el abastecimiento de drogas entre los asistentes al festival.
Ahora sólo queda disfrutar. Atrás quedan los trámites administrativos que han llevado de cabeza a varias administraciones durante los últimos días y la concreción de todos los controles de seguridad que se han tenido que ir perfeccionando. La música, el baile, el brilli-brilli y la diversión cogen este miércoles el relevo. Sólo queda gozar.
