La víspera de San Bernabé concluyó anoche con el ya multitudinario encendido de las luminarias -alrededor de 3.000- en el centro de Logroño. Poco antes de la medianoche, la Cofradía de San Bernabé hizo su reparto en la confluencia de las calles Juan Lobo y Portales. A las doce en punto se celebró la segunda sesión de ‘El Reloj de San Bernabé’ en el balcón del Ateneo y, seguidamente, se apagó el alumbrado público.
“Y que las Vísperas de San Bernabé, por la noche pongan fuegos en las calles y ventanas porque hace que la ciudad sea y esté muy solemne y se hagan repicar las campanas de todas las iglesias”, recogen los textos sobre el voto de San Bernabé. Lo cierto es que en los últimos años se ha conseguido impulsar este acto de las fiestas, aunque no vendría mal repartir junto a la vela el texto del Himno de San Bernabé para aquellos logroñeses -prácticamente el cien por cien- que lo desconocen y así poder cantar.
