Aunque gozar siempre es lo más importante, Holika lleva mucho trabajo y muchos números detrás. Las cifras astronómicas que se registraron el año pasado se quedan en casi una anécdota. Mareantes en algunos casos, quizás la más sorprendente es la del presupuesto. Ha pasado de los 1,4 millones de euros que se invirtieron en la pasada cita musical a los 2,6 millones de euros que se están destinando a esta segunda edición en Calahorra.
Algo más de un 85 por ciento de aumento en un presupuesto que corre a cargo de Burkor, la empresa que se encarga de organizar el acto y que se ha empeñado en que este quinto aniversario (contando los que no se pudieron celebrar por la pandemia) se viva por todo lo alto.
Todo va a más en Holika 2023. Tanto como los decibelios musicales cuando salgan a escena artistas de la talla de Eladio Carrión, Mora, Justin Quiles, Chimbala o Reals B. Un total de ochenta artistas subirán a los tres escenarios con los que cuenta el recinto (al que sólo se puede acceder mediante la pulsera de Holika). A estos se sumarán otros cuarenta, que acercarán el festival a la ciudad. Así, serán otros tres escenarios los que se desplieguen en la localidad riojabajeña.
“La intención es que haya uno en el Mercadal, donde vamos a contar con artistas calagurritanos. También habrá una pool party que se celebrará en las piscinas municipales e Intercatia, un escenario que estará ubicado en el parque del Cidacos y que estará abierto a todo el público para disfrutar de la actuación de Lit Killah”, explica Mario Cornago, gerente de Burkor y alma mater de Holika.
Los conciertos de los principales artistas también serán más largos. “Tenemos la intención de que algunos lleguen o superen los noventa minutos“. Y con la idea de no tener que esperar entre una actuación y otra, se va a habilitar una cabina de djs en el centro del recinto para que la música no pare ni un sólo minuto.
Más horas de música y más llegada de holikers. Si el año pasado fueron 40.000 las entradas vendidas, este año llegan a las 80.000 con un ‘todo vendido’ desde hace semanas. Decenas de horas de música en cuatro días que contarán con más de 7.500 jóvenes acampados.
Las ubicaciones serán distintas a las del año pasado. Si una zona de parque del Cidacos sí podrá seguir utilizándose, ante las exigencias de la Confederación Hidrográfica del Ebro, la zona de acampada cerca del río se disminuye. Para poder acoger al resto de los campistas se han habilitado dos zonas cerca del convento del Carmen, una de ellas municipal y la otra alquilada por Burkor por un periodo de diez años (no hay mayor compromiso que ratifique que Holika seguirá en la ciudad por muchos años más).
La infraestructura del festival Holika de Calahorra, que se celebrará del 28 de junio al 1 de julio, está en marcha. Este lunes comenzó la instalación del vallado perimetral en el aparcamiento de la Catedral. Todo empieza a ponerse a punto gracias al trabajo de algunos de los 700 empleados que darán forma a Holika en las próximas semanas (200 más que el año pasado).
La previsión es que el Día de La Rioja estén finalizadas las primeras infraestructuras y que sea a partir del 15 de junio cuando empiecen a levantarse los escenarios. De momento, ya no se puede estacionar en el aparcamiento de la Catedral y una señal advierte a los usuarios del aparcamiento de autocaravanas que hasta la finalización del evento tendrán que hacerlo en el aparcamiento de La Planilla, en la carretera de Arnedo.
Pronto empezarán a colocarse el doble de barras. “Sólo puedo decir que la barra del escenario central pasa este año al secundario para hacer algo más potente en el principal”. Además añadirán más instalaciones de comida, una de las necesidades que vieron el año pasado después de hacer el balance del festival. “Es verdad que hay que implementar ese servicio porque se nos quedó escaso”.
Alrededor de 450 baños entre el recinto y la acampada, así como decenas de duchas para los campistas en cada una de las zonas donde podrán dormir. Otra de las nuevas ubicaciones pasa por el convento del Carmen, ya que Burkor ha llegado a un acuerdo para poder utilizar algunas de sus dependencias.
“La idea es tener un lugar destinado para el staff y para que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado tengan instalaciones adecuadas para poder mantener sus reuniones”, explica Cornago a NueveCuatroUno. Y es que la previsión es que vuelvan a ser 470 agentes los que compongan el dispositivo de seguridad y velen por que todo funcione dentro de lo esperado.
En definitiva, entre 100.000 y 120.000 metros cuadrados si se suman todas las instalaciones que acogerá la que pretende ser una cita histórica a pesar del cambio de gobierno. “Hemos mantenido ya varias reuniones con la futura alcaldesa, quien nos ha demostrado que está dispuesta a trabajar en todo lo que sea necesario para que Holika se consolide como un atractivo turístico en la ciudad”.
