Francis Paniego ha sufrido este martes el “mal de altura” en Andorra, tras cocinar a más de 2.000 metros de altura para salvar la prueba por equipos de MasterChef (TVE). El programa ha cruzado la frontera para conocer el país y el sector de Grau Roig de la estación de Grandvalira. En él, los equipos han preparado un menú de alta montaña, con el estilo inconfundible del chef riojano (cuatro estrellas Michelín y tres soles Repsol) para 100 esquiadores y amantes de la montaña.
FOTO: MasterChef/RTVE.
“Qué buena pinta”, ha empezado diciendo el cocinero de Ezcaray al ver las patatas y las albóndigas acompañado por Pepe. En ese momento, la primera anécdota antes de encontrarse con la verdadera situación que le esperaba en las cocinas. “Hay cosas que no te van a gustar”, le ha advertido Jordi Cruz.
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Poco a poco, Paniego ha ido dándose cuenta de que el chef catalán no le había mentido. “Esto es un puto desastre. ¿Pero vosotros habíais elegido el plato? No habíais leído la letra pequeña”, ha clamado al ver cómo cocinaban una espardeñas, explicando a su vez que como estaban a 2.000 metros la presión hacía que la temperatura de ebullición del agua cambiara. Lío tras lío, como el del fumet con un pescado sin terminar de limpiar. “No puede quedar sucio. Necesitamos elegancia y limpieza. El punto es que nos quede limpio y brillante para que quede una salsa verde”.
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“Está mucho mejor el otro equipo. Te lo tengo que decir”, ha confesado, antes de arremangarse la chaquetilla para solucionar los continuos problemas de la prueba. “Me voy a poner a echar una mano porque esta gente está en la mierda”.
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Ante el carrusel de instrucciones de Francis Paniego, los presentadores del programa han mantenido una divertida conversación en torno a la actitud del cocinero riojano. Incluso Jordi Cruz le ha entregado una tila para que se tranquilizara.
– Jordi: “No sé qué le pasa al chef”.
– Pepe: “Le he notado sobreexcitado. ¿Puede ser el mal de altura?”.
– Jordi: “Está desatado”.
– Francis: “Qué desastre”.
– Pepe: “Yo qué le voy a decir. Se ha vuelto loco”.
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Finalmente, Paniego le ha hecho una petición a Jordi. “No me vuelvas a traer a estos líos. Qué sofocón. Por favor, probad de sal las cosas”, ha señalado, antes de realizar otra confesión al realizar al concursante Fray Marcos. “Yo fui menesiano porque estudié en los frailes”, ha reconocido el cocinero riojano, bromeando con que entonces “ha sido fraile antes que cocinero”.
