Sergio Rodríguez ha expresado sus sensaciones tras la victoria de la UD Logroñés frente al Real Unión (1-0). El equipo blanquirrojo se ha impuesto con un gol postrero de Rufo, para quedarse a siete puntos de la permanencia. Aún así, el técnico reconoce que no ha vivido la mejor tarde: “Ha sido un partido no brillante por parte de los dos equipos, ambos en muy mala dinámica y donde los nervios pasan factura. Algunas acciones fáciles y técnicas no salen por la carga que se lleva encima. No sé si merecíamos ganar, lo más justo hubiera sido un empate, pero hoy hemos tenido la justicia que no tuvimos otros días (Intercity y Castellón)”.
¿Un refuerzo anímico? “Los tres puntos nos sirve para irnos con una satisfacción, que llevamos muy pocas este año. Sé que es poco para la gente, pero es una pequeña alegría dentro del drama que está siendo la temporada. A nivel de equipo, nos tiene que servir para coger un poco más de confianza y enfrentar el partido del Amorebieta con otra energía, más positivos y sacar ahí puntos. No nos proporcionan nada a nivel clasificatorio, pero sí nos tiene que servir para que consigamos otros tres, otros tres otros tres, y así tener opciones. Sabemos que las posibilidades son remotas, pero somos profesionales y no vamos a bajar los brazos”, ha expresado.
En esa línea, ha explicado que los partidos suelen decidirse por detalles y que, según su punto de vista, no existen tantas diferencias entre los equipos de arriba y de abajo. En cuanto al juego, ha echado en falta más precisión en ataque: “Hemos tenido situaciones en tres cuartos donde nos faltaba un último centro, un último pase. El Real Unión venía con las ideas bastante claras, a buscar algún contragolpe”. La ha tenido Nacho González, que ha fallado un mano a mano ante un Crettaz muy acertado. Poco después ha llegado el gol de Rufo, que según Sergio “tiene mucha llegada y agresividad, se ha jugado la cabeza para hacer el gol”.
Dicen que la esperanza nunca se pierde: “No podemos perderla, porque si no, va a ser un calvario. Todo está siendo muy duro y muy difícil para todos. Eso es lo que nos puede dar la fuerza para el siguiente día”. En la victoria, también ha habido un componente de fortuna. El colegiado Ávalos Martos ha amonestado a Doncel, cortando una jugada de mano a mano para los vascos. Incluso el colegiado se ha arrepentido de la jugada: “Cuando nos perjudican, nosotros no ponemos la lupa en los árbitros. Lo hemos visto todos, ha sido un error humano. En treinta y ocho jornaddas, es lógico que alguna vez te quiten y otra vez te den”.
Rufo se estrena
Por su parte, Rufo se ha mostrado muy contento por su gol: “Ha servido para sumar los puntos que tanto ansiábamos y para que podamos coger confianza. Pichín ha sacado de banda, Vini o un defensa han rematado bombeado, yo he metido la cabeza y ha entrado. He sentido una alegría enorme, no solo por mí, sino por el equipo, que merecía una pequeña alegría. Esperemos que esta victoria nos saque un poco de presión. A ver si nos sentimos más liberados y hasta que matemáticamente sea posible, vamos a lucharlo, así pensamos todos en el vestuario”.
