El Servicio Riojano de Salud ha estrenado este viernes la plataforma robótica Da Vinci, que ha realizado con éxito su primera intervención a cargo del servicio de Urología. Ésta ha sido una protatectomía radical en un paciente varón de 73 años diagnosticado con cáncer de próstata.
El equipo que ha participado en la intervención ha estado formado por el doctor Daniel Pascual y la doctora Silvia Álvarez, de Urología; Naia Aguirre y Sandra Escudero, de Anestesiología y Reanimación; Maryna Gromova, enfermera instrumentista; Oria Rodríguez, Sonia Jiménez y Teresa Sebastián de Enfermería, así como todo el personal TCAE, celador y de limpieza del bloque quirúrgico que han colaborado en la preparación y traslado del paciente.
Para el Servicio Riojano de Salud, contar con una plataforma robótica de estas características y con profesionales acreditados para su utilización supone un salto cualitativo enorme en la apuesta por la seguridad y calidad para los pacientes y por la innovación en el sistema público. Además, con esta inversión se promueven las condiciones para que el cirujano del SERIS disponga de las mismas herramientas que los de otras comunidades y se mejora la condición para atraer y retener talento de las especialidades quirúrgicas.
En las próximas semanas, se van a abordar nuevos procedimientos asistidos por la plataforma robótica en otras especialidades como Cirugía General, Ginecología y Otorrinolaringología.
La plataforma robótica
Tras publicar la licitación de la plataforma robótica hace un año, en el mes de agosto de 2022 se produjo la adjudicación del contrato a la empresa Abex para la instalación de la plataforma robótica Da Vinci en el Hospital Universitario San Pedro con una inversión de 990.000 euros (IVA no incluido) que ha sido financiada con fondos europeos.
Con la puesta en marcha de esta plataforma, se lograrán diferentes ventajas, tanto para el procedimiento y los profesionales, como para los pacientes. Así, se garantiza la máxima exactitud, debido a la alta calidad de imagen y visión de los puntos de referencia y planos anatómicos, y permite una mayor precisión en los movimientos del cirujano.
El robot ejecuta las acciones que le son ordenadas por el médico, eliminando errores como el temblor que la mano humana tiene por naturaleza. Dispone de un sistema de movimientos a escala por lo que permite mayor precisión reconstructiva y otorga mayor libertad de movimiento al cirujano que en una cirugía laparoscópica tradicional.
Entre los beneficios para el paciente: disminuye el sufrimiento de los pacientes ya que las incisiones que se realizan son de entre 5 y 10 milímetros de diámetro, lo que representa suficiente espacio para permitir la entrada de los instrumentos del robot lo que conlleva, además, menor pérdida de sangre, menos transfusiones y reduce el tiempo de estancia hospitalaria de los pacientes, favoreciendo la recuperación postoperatoria.
