El pasado año se celebró el 40º aniversario del Estatuto de Autonomía de la Rioja. Durante estos años hemos tenido un evidente desarrollo económico, pero a día de hoy se empiezan a vislumbrar oscuros nubarrones. Las grandes empresas de nuestro tejido industrial, o se han deslocalizado, o en su gran mayoría han sido compradas por multinacionales o fondos de inversión extranjeros. Además, partes importantísimas de nuestra industria, como eran el textil o el calzado, casi han desaparecido tras verse obligados a competir en un mercado global sin ningún tipo de protección. Tampoco hay que olvidar el impacto brutal que durante años han tenido las vacaciones fiscales vascas, tanto a la hora de establecerse empresas, como a la hora de irse por las facilidades ofrecidas al otro lado de la frontera.
La Rioja encabezó en el año 2022 la pérdida de empleos de autónomos dentro del Estado, con un descenso del 1,9 por ciento. No hay que olvidar, en relación con ello, que España lidera en los último años de manera destacada el aumento en la quiebra de empresas dentro de toda la Unión Europea con un aumento del 163 por ciento. En relación al sector turístico, fue la que peores datos tuvo de su entorno después de la pandemia, con una caída del sector de un 6 por ciento, mientras Navarra ganaba un 20,8 por ciento y el País vasco un 7,6 por ciento.
En relación con lo anterior, el reciente informe de la fundación Funcas, pronostica que La Rioja será previsiblemente la comunidad con menor crecimiento de su PIB en el año 2023 con un 0,8 por ciento.
Respecto al comercio, uno de los grandes pilares económicos de la comunidad, solo hay que darse un paseo por algunas calles de Logroño. ¿Algún iluso pensaba que las grandes superficies no iban a tener ningún impacto en el comercio local? Esto unido al comercio electrónico, ¿alguien cree todavía que el pequeño o buena parte del mediano comercio, va a resistir mucho tiempo frente a la competencia de empresas como Amazon? Si alguno tiene alguna duda al respecto, solo tiene que darse un paseo por la antigua joya del comercio riojano y uno de los grandes atractivos de la ciudad, la zona de las Cien Tiendas, con una tercera parte de sus comercios ya cerrados.
Respecto a la población, la Rioja registró en el 2022 una bajada del 8 por ciento de la natalidad, el peor dato de todo el Estado. Y no es un dato extraño, cualquiera que viva en Logroño capital sabe que por los precios de la vivienda , el de los alquileres y por la situación laboral , es casi imposible tener un proyecto de vida para una pareja joven; como mucho y con suerte, les puede dar para un alquiler y tener un animal de compañía, poco más.
Este problema de la natalidad ya no existe en muchos de nuestros pueblos. Muchos quedarán prácticamente deshabitados en los próximos 20-30 años, cuando la última generación que pudo ganarse la vida en el campo, desaparezca. Nuestros políticos en manos de la mafia globalista han legislado de tal manera que solo los grandes productores pueden competir en el mercado. Gracias a esta legislación, prácticamente ha desaparecido la ganadería y de no ser por las ayudas, también la mayor parte de la agricultura. Lo que llaman la España vaciada, no es nada más que una falacia política, el termino correcto es la España exterminada. Exterminada por leyes hechas por nuestros políticos a las órdenes y en beneficio de las grandes multinacionales agroalimentarias y de los grandes grupos de poder mundiales, cada vez más poderosos y ricos.
Sobre nuestro nivel en medios de transporte, el ferroviario es prácticamente nulo, muy caro y con pocas líneas; la red de carreteras no resiste la más mínima comparación con nuestros vecinos vascos y navarros, y del aeropuerto, ruinoso económicamente y con apenas tráfico, mejor no hablar.
Ya para terminar, decir que los riojanos vivimos dentro de una supuesta comunidad nacional histórica llamada España. Esta España, nos guste o no, ya hace tiempo que ha dejado de ser una Nación, para convertirse en un Estado plurinacional. Un Estado en la actualidad fallido e inviable, formado por Comunidades Nacionales de Primera, que solo piensan en su único beneficio y en acabar con el propio Estado y otros territorios como el nuestro, que al no tener una nacionalidad histórica, somos ciudadanos de 2ª y no pintamos nada en ninguna de las decisiones importantes que se toman y que nos afectan.
Teniendo en cuenta que el Estado está quebrado por el nivel estratosférico de su deuda (2,35 billones de deuda externa global, casi el 200 por ciento del PIB) y que solo se mantiene gracias a la compra masiva de su deuda por parte del Banco Central Europeo, la Rioja indirectamente también lo está; el chantaje continuo y consentido de los nacionalistas a nuestros políticos, los efectos perniciosos de la globalización en nuestra industria, agricultura y comercio ¿algún riojano piensa que tenemos algún tipo de encaje en este Estado plurinacional cuya soberanía hace tiempo que nuestros políticos, vendieron a grupos separatistas y a poderes externos globalistas?
Todos los datos indican que nos espera un futuro de pobreza y de misera como nadie ha conocido. Espero equivocarme pero francamente no veo un solo dato que me indique otra cosa, los ricos cada día son más ricos y la clase media cada día está más empobrecida y freída a impuestos, de seguir así en 15-20 años, la sociedad riojana tal como la hemos conocido habrá desaparecido. Aunque igual es antes, vivimos encima de una bomba de relojería y no sabemos qué día va a estallar, igual no tarda tanto.
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