La consejera de Agricultura de La Rioja, Eva Hita, ha destacado este viernes que la nueva Política Agraria Común (PAC) constituye una oportunidad para integrar a producciones como la horticultura, fruticultura y vitivicultura de la región.
Así lo ha trasladado a los representantes de la cooperativa El Raso, de Calahorra, con los que se ha reunido, dentro de los encuentros celebrados en los últimos días con los de las cooperativas GARU, de Santo Domingo de la Calzada; Cooperativa de Albelda de Iregua y la cooperativa Viñedos de Aldeanueva, en Aldeanueva de Ebro.
Hita ha transmitido la oportunidad que ofrece la nueva PAC al habilitar una reserva de derechos de pago de la ayuda básica a la renta de sostenibilidad, de ámbito nacional. De este modo, ha explicado que habrá una asignación de nuevos derechos a agricultores activos que cumplan determinados requisitos, y que no pertenecen a sectores integrados en el pago básico que, en La Rioja, supone una oportunidad de incluir a cultivos estratégicos para la región como la fruta, las hortalizas y la viticultura.
Este acceso a la reserva nacional de derechos también favorecerá a jóvenes agricultores y nuevos agricultores, incorporados por primera vez y recientemente, ha detallado.
Se beneficiarán también agricultores que no pueden acceder por joven o por nuevo agricultor, que han ejercido la actividad como responsables de explotación desde al menos 2015 y que no han sido titulares de derechos de pago básico.
También, la nueva PAC permitirá remunerar el compromiso medioambiental de las explotaciones por la realización de prácticas voluntarias beneficiosas para el clima y el medio ambiente, con lo que se cumple el criterio de ser agricultor activo sin necesidad de tener derechos de pago, ha detallado la consejera.
Hita ha resaltado, además, la importancia que la PAC ha otorgado a la modernización del regadío en La Rioja, con 45,6 millones de euros del Plan de Recuperación, un 8 por ciento del presupuesto nacional. La titular de Agricultura también ha valorado la apuesta por el modelo cooperativista para centralizar compras, compartir medios, ganar dimensión, poder de negociación y representatividad en el mercado.
Les ha informado de las ayudas directas extraordinarias en el contexto del conflicto de la invasión de la guerra de Ucrania, otorgadas por los gobiernos de España y La Rioja, para aliviar la subida de los costes de los insumos, que suman 3,28 millones de euros. También ha mencionado que el Gobierno de España impulsa nuevas reducciones fiscales excepcionales por la adquisición de gasóleo y fertilizantes a los agricultores y ganaderos, así como ayudas directas para su adquisición.
Los representantes de la cooperativa El Raso le han transmitido las dificultades del sector hortofrutícola como la rentabilidad, por la subida de los costes de producción, y sus efectos a medio y largo plazo de esta orientación productiva. Asimismo, se han referido a la falta de relevo generacional, la ausencia de mano de obra y el exceso de burocracia y han demandado ayudas directas específicas para el sector hortofrutícola, con el fin de favorecer la competitividad de un sector en un momento de inflexión.
Entre los retos de la hortofruticultura, han mencionado, además, la alta fragmentación de las tierras de cultivo, que dificulta el acceso a determinadas ayudas por superficie y, en este sentido, se han mostrado a favor de procesos de concentración parcelaria para ganar dimensión.
Han demandado una apuesta por la investigación aplicada en hortofruticultura, para la que está actualmente abierta la convocatoria para subvencionar proyectos de campos demostrativos.
Además, la Consejería de Agricultura ha transmitido la contribución que la Unidad de Gestión y Transferencia de Conocimiento Agrario realiza para la formación continua técnica del campo riojano en las diferentes orientaciones productivas, y enfocada a abordar las necesidades de actualización formativa que detecte el sector agrario.
