La Unión Deportiva Logroñés quiere que sus aficionados les acompañen a Calahorra en un partido que puede marcar el devenir del curso en una situación realmente complicada por límite. El descenso a Segunda Federación persigue a un equipo que logró ganar el pasado sábado a Osasuna Promesas después de dieciséis jornadas sin conseguirlo. Se aferra a la categoría y afronta este domingo a las cuatro de la tarde una final por la permanencia en una nueva edición del derbi ante el Calahorra, que también se juega buena parte de sus opciones de seguir peleando por la salvación toda vez que ganó el pasado fin de semana al Bilbao Athletic en Lezama.
Ambos equipos quieren que el partido sea una fiesta antes del encuentro y que luego el fútbol decida qué equipo merece los tres puntos. Por eso, la UD Logroñés, pensando en sus aficionados más jóvenes o que no tiene forma alguna de desplazarse hasta la ciudad riojabajeña, ha fletado un autobús que estará sujeto a la presencia de al menos cuarenta seguidores para que haga el recorrido de ida y vuelta al derbi. Los interesados deberán abonar 12 euros. El viaje comenzará a las 13:00 horas y regresará al término del encuentro.
Vermut por Calahorra
Por su parte, la Peña Crianza Rojilla quiere que la afición local y visitantes, cuyas relaciones son fantásticas desde hace muchas temporadas, quiere que antes del inicio del choque el derbi se viva como una fiesta a pesar de la mala clasificación de ambos equipos. Por eso ha organizado una serie de actividades para todos los públicos. Desde las 11:30 horas habrá talleres, juegos y otras actividades infantiles. Y a partir de las 12:30 horas, aumentarán los decibelios con Djs en directo en la zona del Oasis y de El Otro. Crianza Rojilla invita a los seguidores blanquirrojos a que se sumen a esta fiesta del fútbol.
