Nuevas cartas sobre la mesa. Conformen avanzan las semanas, los agentes que conforman Rioja van haciendo públicas sus posturas sobre la mejor forma, para ellos, de salir de esta crisis que inunda la denominación. El último en hacerlo ha sido la Federación de Cooperativas Agrarias de La Rioja, FECOAR, que ha acordado llevar al Pleno del Consejo Regulador su propuesta: reducir los rendimientos en campo al 90 por ciento para uvas tintas y mantener el cien por cien para blancas, así como bajar al 70 por ciento de rendimientos en transformación en bodega.
Unas medidas que platea sean de cara a las dos próximas campañas para “la estabilización de la ratio en el seno de la denominación con el objetivo principal de lograr a corto plazo equilibrar los precios en origen de uva y vino”. Medidas que se valoraron este martes durante una Asamblea General de Vino en la Bodega Cooperativa San Cosme y San Damián de El Redal y que se trasladaron al resto de asociaciones del Consejo Regulador.
Las cooperativas proponen de forma principal fijar para las próximas dos campañas unos rendimientos productivos de 5.850 kilos por hectárea para la uva tinta (90 por ciento del rendimiento tipo) y de 9.000 kilos por hectárea la uva blanca (cien por cien del rendimiento tipo) y un rendimiento de transformación del 70 por ciento. Abel Torres, portavoz de FECOAR, explica que “ante una situación difícil como la actual con un consumo de vino muy resentido y unas existencias de vino en la DOCa cercana a los 938 millones de litros, entendemos que no cabe otro escenario posible que el de asumir un recorte de rendimientos que al menos permitirá dejar de inyectar en el mercado cerca de unos 40 millones de uva tinta”.
Pero, además de asumir estas medidas, también reclaman el apoyo del resto de agentes: “Como viene siendo habitual, el acuerdo que se cierre en el seno del Consejo contará con el apoyo y la presencia de las cooperativas. Por ello, y de cara a lograr un acuerdo equilibrado y en línea con la situación actual, le pedimos al otro lado de la mesa que sea sensible con el esfuerzo realizado por parte del sector productor y que se llegue a un compromiso de no plantear plantaciones para al menos los próximos tres años”.
La propuesta trasladada por las cooperativas argumenta, también, que las sucesivas crisis exógenas que se han sufrido en los últimos años han provocado una acumulación de existencias de vino y una perdida de rentabilidad que requieren de “una intervención urgente por parte de las tres administraciones regionales que conforman la denominación”. Por ello, desde FECOAR apoyarían, por un lado, una medida excepcional de descalificación de 30 millones de litros amparados a vinos sin indicación geográfica de forma anual y, por otro, proponen habilitar otra medida que permitiese compensar a los viticultores inscritos en la denominación por la pérdida de renta que se está generando.
Torres incide en que “el objetivo aquí es lograr a corto plazo aliviar la ratio de forma considerable y alcanzar unos valores más equilibrados en pro de la rentabilidad del sector. Por un lado, apoyaríamos la retirada de una cantidad importante de vino del mercado sin generar un gran perjuicio a las bodegas, a la vez que compensaríamos la pérdida de renta del sector productor que va a sufrir en los próximos años y que seguramente no vea correspondida de forma natural el recorte que se va a llevar a cabo”.
El portavoz de FECOAR se muestra convencido de que “el conjunto de medidas planteadas, además de abogar por un mayor equilibrio dentro de la DOCa, permitirá mejorar la calidad de Rioja. Por ello, ahora más que nunca, necesitamos el apoyo de las administraciones regionales ante una situación que el sector no puede resolver de forma solitaria”.
