David Torices ‘Dupi’, director deportivo de la UD Logroñés, percibe la decepción de los aficionados blanquirrojos por no haber completado las fichas senior disponibles. Sin ser consciente, parece, del verdadero nivel de enfado, que supera de largo la relación habitual de una hinchada cuando su equipo no gana un partido. Porque está muy presente la sensación de que no actuar en las horas finales de la última oportunidad para reforzar a un equipo que no está a la altura es dar la temporada por perdida, cuestión que sorprende (y enfada) a Dupi.
Dupi es un hombre de fútbol, y sabe que el mayor de los handicaps del club ahora mismo es su pésima clasificación (a cinco de la permanencia); y sabe, sin verbalizarlo tampoco, que no todos los jugadores están dispuestos a subirse a un barco que hace aguas. “No tengo problemas en dar todas las explicaciones que hagan falta, porque creo que así se entenderá mejor nuestro trabajo”, deja claro Dupi antes de comenzar esta entrevista.
-¿Cómo está siendo este 1 de febrero?
-Seguimos sin parar. Porque podemos fichar. Por tanto podemos seguir mejorando la plantilla. Y en eso estamos, plenamente concentrados en esta labor.
-¿Cómo fue el 31 de enero, cuando había incluso más margen que en este 1 de febrero para hacer movimientos que mejoraran la plantilla?
-No había nada que pudiera mejorar la plantilla. Y no íbamos a traer a nadie por traer. Este club nunca ha trabajado así, y esta vez, pese a la clasificación, no íbamos a cambiar esta norma.
-¿No se podía mejorar una plantilla que está en descenso, a cinco puntos de la permanencia, que lleva sin ganar un partido de fútbol desde hace más de tres meses, y a la que el penúltimo clasificado le metió tres el pasado domingo? Porque esto es lo que ve todo el mundo.
-Hemos mejorado la plantilla. Hemos hecho cuatro operaciones. Y solo nos quedaba una más por hacer. Que finalmente no se dio en los últimos días del mercado. El balance que hacemos es muy positivo, porque hemos reforzado posiciones que creíamos necesarias para solventar la situación en la que nos encontramos.
-Habla de cinco operaciones. Y que se ha caído una, que no se ha podido realizar finalmente. Ahora le preguntaré por los motivos, pero antes, ¿si había cinco operaciones por hacer quiere decir que había una planificación? Porque hasta esto se pone en duda.
-Claro que había una planificación. Somos el Logroñés. Somos un club de fútbol profesional. Sabemos hacer las cosas, y trabajamos para hacerlas siempre bien. El balance que hacemos es que hemos crecido. Hemos dado las bajas que creíamos necesarias, y hemos incorporado cuatro jugadores que creemos necesarios. Hicimos primero un trabajo muy detallado para perfilar qué tipo de futbolistas necesitábamos. Y hemos encontrado lo que queríamos. Es verdad que el mercado de invierno es muy complejo, y que ha habido jugadores que nos interesaban para una posición muy concreta que finalmente o no han logrado rescindir con sus clubes o finalmente se han decantado por otras opciones. Ha llegado lo que buscábamos.
-Pero Jorge Martínez-Losa se ha caído finalmente, y la realidad es que hay dos fichas que se han quedado sin completar, sin olvidar los malos resultados del equipo. Y no se entiende que el 31 de enero no se lograra incorporar a dos jugadores senior que mejoraran la competitividad.
-Insisto, no íbamos a fichar por fichar. Y seguiremos trabajando para incorporar dos futbolistas que mejoren lo que ya tenemos. Igual en 24 horas o en 48 horas hay novedades y estamos hablando de otra cosa.
-Lo de Jorge es una desgracia. Sin duda. Pero hay quien insiste que el martes por la noche no había luz en las oficinas del club, cuando hay tanto en juego. Aseguran que se fueron demasiado pronto a casa.
-Eso no es así. Yo estaba viajando pero hay teléfonos y el contacto fue constante y continuado. Y Sergio (Rodríguez) se marchó de las oficinas a las 22:45, cuando ya sabíamos que no íbamos a hacer la operación que pretendíamos, sencillamente porque no se pudo. Decir que no se trabaja lo suficiente por no haber cubierto todas las licencias es injusto. Nos estamos dejando el alma.
-Pero sí parece un fracaso. ¿Lo ve usted como un fracaso? Me refiero a no haber completado las licencias.
-Para nada. No es en absoluto un fracaso. Fracasar es no intentarlo, y nosotros lo hemos intentado hasta el final. Pero no ha salido la última de las cinco operaciones que teníamos marcadas. Hemos hecho cuatro fichajes, con la mala suerte de que Jorge ha recaído en su lesión, pero no íbamos a firmar un delantero por firmar. Claro que me hubiera gustado que el mercado fuera distinto pero es lo que hay. Representamos a un club fantástico, pero ahora mismo no somos el club más atractivo de toda la Primera Federación. Y eso hay que tenerlo en cuenta. Hemos incorporado cuatro futbolistas que están convencidos de que esto se puede sacar adelante, y eso es lo importante.
-Pero a día de hoy la situación es la siguiente: 19 jugadores, un único portero, sin competencia en los extremos, y con solo dos delanteros centros.
-Hemos evolucionado la plantilla. Las llegadas la mejoran.
-Pues la sensación es de debilidad, sobre todo en determinados puestos, como la posición de extremo, donde ni Doncel ni Thior tienen competencia, por la lesión de Pichín y la no llegada de un extremo derecho.
-La sensación de debilidad es muy subjetiva. Yo no lo veo así, lógicamente. Y he comentado anteriormente que de las cinco operaciones solo una no hemos logrado cerrarla. Se puede imaginar la posición que queríamos mejorar. Ahí estaba el quinto elemento, un extremo que mejorara el juego en esa posición. Y en cuanto al 9, es evidente que la baja de Jorge es un palo primero para él y luego para el equipo. Es un chaval fantástico que se implicó desde el primer día. Eso es lo que buscamos. Y sí tenemos delanteros. Porque Schutte también puede jugar en esa posición, como ya ha demostrado.
-Ya, pero resulta que a Vinicius se le dijo que su rol iba a ser diferente, que pasaba a ser el tercer delantero, y encima su rodilla no está en las mejores condiciones.
-En ningún momento se le enseñó la puerta de salida. Eso no es así. Lo de los roles es una cuestión que va surgiendo conforme evoluciona la temporada. Puedes empezar de titular, y luego caerte de la convocatoria, después volver al once. Así es el fútbol. Los roles varían, pero Vinicius no ha sobrado en ningún momento.
-¿Y Juan Carlos Menudo? Fue otro de los que estuvo sin jugar mientras duraba este periodo de fichajes.
-Tampoco. Se habló con él. Y todo quedó claro. Tampoco se le abrió la puerta de salida.
-¿Y Pichín?. ¿Se le estaba buscando equipo antes de que se lesionara?
-Dani quiso hablar con nosotros. Nos dijo lo que pensaba, que quería más minutos. Y que si llegaba una oferta, porque Dani tiene mercado, que la iba a valorar. Pero se lesionó y Dani Pichín es jugador de la UD Logroñés y esperemos que vuelva cuanto antes.
-¿Y qué opina Natxo González de todo esto?
-Eso se lo tendrá que preguntar a él. Nuestro entrenador ha conocido en todo momento cómo estábamos trabajando y en qué estábamos trabajando. La comunicación es constante. Y la confianza mutua es plena. Lógicamente él quería que le trajéramos lo mejor. Y eso es en lo que hemos trabajado y en lo que estamos trabajando.
-Podría pensar con razón que cuenta con dos jugadores menos.
-Le puedo garantizar que no estamos preocupados. Estamos ocupados, pero no preocupados. Seguimos trabajando.
-No sé si se ha dado cuenta del mensaje que han enviado al exterior, mensaje que no sé si ha llegado también al interior del club. Me refiero a esa sensación de haberse rendido antes de intentarlo, todo por no haber completado las licencias.
-(Respira enfadado y eleva el tono). ¿Qué nos hemos rendido? ¡Pero cómo vamos a bajar los brazos! Hemos intentado traer a los mejores, que es lo que se merece este club. Fuera puede resultar extraño no haber completado las fichas, pero este club, el Logroñés, no ficha por fichar. No nos podemos equivocar porque nos estamos jugando muchas cosas.
