La UD Logroñés ha empatado frente al Amorebieta (1-1), en un debut decepcionante de Natxo González. Buján ha adelantado a los visitantes, mientras que Clau Mendes ha salvado un punto para los riojanos. Sin embargo, los visitantes han sido mejores y han merecido la victoria. 16 puntos, media tabla y muchísimo que mejorar. Solo un punto por encima del descenso.
Primer encuentro del nuevo técnico y titularidad para Keita en la mediapunta, escoltado por Doncel y Menudo. Arriba, Vinicius. El resto del equipo, más o menos similar a lo que venía proponiendo Aguilá. Bajo un césped en pésimas condiciones, los blanquirrojos necesitaban un triunfo balsámico para borrar algunos nubarrones del horizonte. Todo ha arrancado bien, Yriarte ha derribado a Keita dentro del área y ha mandado a Menudo a los once metros. El sevillano ha marrado esta gran oportunidad, mandando la pelota al larguero. Poco después, Menudo ha servido un saque de esquina y Cristian, a bocajarro, ha rematado arriba.
Con el paso de los minutos, la UD Logroñés se ha deshecho como un azucarillo. Hasta que después de una cadena de despropósitos, los vizcaínos se han adelantado antes de la media hora. Vinicius quería buscar a Campins, pero ha encontrado directamente al oponente. A partir de ahí, rápido pase hacia Seguín, carrera por banda, centro, peinada y remate de Buján dentro del área. Tristeza y resignación entre un público demasiado callado, desangelado. Decepcionado en definitiva. Pobre y muy mala imagen de un equipo incapaz de dominar y de llegar. Un panorama ciertamente desolador y el Amorebieta lo estaba aprovechando.
Foto: UD Logroñés
Atisbando la herida, los azules han intentado explotar al máximo los puntos débiles de los riojanos. Cada centro aéreo hacía mucho daño y en una de esas jugadas, Arregi ha sacado prácticamente bajo palos un disparo que iba encaminado a ser el 0-2. Música de viento y mucho silencio en una mañana gélida. Cielo gris, como una temporada que corre riesgo de irse a la deriva. Y aunque solo es la jornada 13, el descenso está muchísimo más cerca de lo deseado. Claro que el fútbol puede cambiar en instantes, pero no daba la sensación de ello.
Solo Cristian, con sus arrebatos de orgullo, arrancaba algunos aplausos en la grada. No se podía decir lo mismo de Arregi, incluida una pérdida en conducción que pudo ser catastrófica. El Amorebieta dominaba en lo importante: sensación de peligro y ocasiones. La UD Logroñés era incapaz de generar juego y ocasiones. Por ello, Clau Mendes y Boniquet han entrado al campo. Mientras tanto, los visitantes seguían picando. Izeta ha intentado un disparo con parábola desde el pico de entrada, desatando el ‘ohh’ de algunos en la grada. No era para menos.
El Amorebieta ha planteado un encuentro muy serio y con alta intensidad en el centro del campo, ha cortocircuitado el juego de los logroñeses. Les costaba un mundo avanzar metros y seguían sin probar a Magunazelaia. Solo Keita, con un disparo rozando el palo, ha avisado. No había manera, mientras Sibo se hacía un gigante en el centro del campo. Posteriormente, turno para Pichín y para Sergi. En la grada, cabreo: “Jugadores, mercenarios”. No gusta la dinámica, ni la actitud, ni el cariz de un curso futbolístico con un suspenso rotundo. El marcador podría ser incluso peor, porque Arregi ha sacado un remate bajo la línea de Murua. Por segunda vez.
Tal era la situación, que visto el guion, un empate podía considerarse como un mal menor. En una acción de lo más rudimentaria, Clau Mendes ha rematado a bocajarro y ha parado el portero. A la siguiente, zurdazo espectacular de Clau desde fuera del área para hacer el empate y al menos, salvar un punto. Con todavía tres más eñ añadido, el equipo ha intentado ganar a la directa. Difícil.
Foto: UD Logroñés
Y la ha tenido nuevamente Mendes, con un testarazo que ha salvado Magunazelaia. Después, Crettaz ha salvado un buen remate de Dorrio. La UD Logroñés visitará al Eldense (sábado 18:00).
