TRIBUNA

CETM La Rioja aboga por regular las condiciones de subcontratación en el transporte

La entrada en vigor del Real Decreto Ley 3/2022, de 1 de marzo, de medidas para la mejora de la sostenibilidad del transporte de mercancías por carretera y del funcionamiento de la cadena logística no ha venido a solucionar los muchos problemas que amenazan la supervivencia de nuestras empresas de transporte.

Entre otras cuestiones, estos cambios normativos persiguen que nuestras empresas de transporte puedan repercutir el exponencial aumento de los costes, que vienen soportando desde hace más de un año, a sus cargadores. En teoría y a simple vista, la medida es perfecta, pero llevarlo a la práctica, en muchísimas ocasiones, es prácticamente imposible.

Primero, porque son los propios cargadores los que no acatan la repercusión del alza de los costes al precio de los servicios de transporte que prestan nuestras empresas y también por el elevado número de intermediarios que intervienen en la cadena de subcontratación sin aportar ningún valor a las operaciones de transporte.

Estos intermediarios suponen un grave problema para nuestro sector, ya que carecen de vehículos y también de conductores, permaneciendo totalmente ajenos a los problemas a los que se enfrenta una empresa de transporte al uso, con vehículos y plantilla propia, tales como horas de espera en las cargas y las descargas, sanciones, averías, paralizaciones, contratación de conductores, alza de los carburantes…

Este tipo de intermediación lastra el desarrollo del sector del transporte de mercancías porque quienes lo ponen en práctica obtienen un beneficio seguro a costa del transportista efectivo, que es quien realmente realiza la operación de transporte, sufre innumerables avatares para su realización y ve cómo el precio de la prestación del servicio no viene a satisfacer los costes en los que ha incurrido para la realización del propio servicio.

Estas prácticas, por desgracia, tan habituales convierten el transporte de mercancías en un sector insostenible, siendo muchos los transportistas obligados (o invitados) a abandonar la profesión y muy pocos los que se sienten atraídos a emprender proyectos empresariales de transporte al uso, con flota propia. Esta disyuntiva hace que la supervivencia de un sector estratégico esencial para el desarrollo económico y social, como el del transporte de mercancías, se tambalee.

Por si fuera poco, este tipo de intermediarios suele incumplir por lo general los plazos de pago, prolongando el pago a proveedores por encima de los 30 días que marca la normativa vigente, incrementando así el abuso que ejercen sobre los transportistas con flota propia que realmente realizan los servicios de transporte.

Desde nuestra organización empresarial, entendemos que es necesaria una reorganización y una regulación del sector del transporte de mercancías en este sentido que venimos denunciando, de acuerdo con estos dos principios:

– Que sea requisito ‘sine qua non’ que todo quien participe en la cadena desubcontratación disponga de flota propia.
– Que el límite máximo de servicios que el flotista pueda subcontratar se limiten en proporción al número de vehículos que dispone.

Entendemos que en estos momentos en los que la tecnología es tan accesible para todos, las agencias de transporte ya no aportan valor alguno en la cadena de subcontratación, convirtiéndose en una carga para quienes efectivamente realizan los servicios de transporte.

Desde CETM La Rioja creemos que este es uno de los principales problemas que sufre hoy nuestro sector, llevando a las empresas de transporte a una situación límite y, lamentablemente, en muchos casos, imposible de sobrellevar.

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