Tras la derrota frente al Cornellà (0-1), el futuro de Albert Aguilá como entrenador de la UD Logroñés está complicado. Después de ocho jornadas de liga, los riojanos han conseguido solo 10 puntos de 24 posibles. Por supuesto, un bagaje insuficiente para alcanzar el playoff y para ser un equipo competitivo. La tabla deja un mensaje claro: solo un punto por encima del descenso. Bien es cierto que la clasificación está en un puño y el playoff solo está a dos puntos. Pero la zona roja ya está demasiado cerca y algo muy grave: el balance en Las Gaunas es de un triunfo y tres derrotas. Y dos derbis perdidos. Eso es muy difícil de sostener.
Hasta la fecha, Aguilá ha disputado 17 encuentros como entrenador de los blanquirrojos. Su balance es de 7 victorias, un empate y 9 derrotas, incluida la del playoff frente al Villarreal B. Si juntáramos todos sus partidos en formato liga, llevaría solo 22 puntos de 51. Son cifras de equipo de zona media-baja, de los que se salvan sin demasiado margen. En porcentaje, un 41 por ciento de victorias, un 53 por ciento de derrotas y un 8 por ciento de empates. 1,35 puntos por partido.
En comparación con otros entrenadores blanquirrojos, el actual preparador ostenta el mayor porcentaje de derrotas al frente del equipo: el 53 por ciento. En ese apartado estadístico, le siguen en el histórico Raúl Llona (con el 41 % de encuentros perdidos entre 2012 y 2014) y Rafa Berges (temporada 16-17, con un 36 % de derrotas). En este sentido, cabe destacar que los presupuestos con los que contaron el riojano y el cordobés (que sustituyó a Pouso en el banquillo) distaban mucho del que ha tenido Aguilà este curso.
Como nota metodológica, hay que recordar que Sergio Pellicer cuenta por derrotas los dos encuentros que dirigió en la UD Logroñés de la campaña 2010-2011, si bien al ser interino no se puede considerar la muestra como representativa.
Foto: UD Logroñés
Albert Aguilà llegó al primer equipo de la UD Logroñés la temporada pasada, a falta de ocho encuentros. Su misión, meter al equipo en playoff. Lo logró. Debutó con victoria frente al Tudelano (1-0) y después tres derrotas ante el Racing (1-0), Racing de Ferrol (1-2) y Deportivo de la Coruña (3-0). Obligado a ganar, la UD Logroñés ganó al Zamora (4-1). Sin embargo, perdió el derbi, donde se salvó la SD Logroñés (3-2). Cuando más negro se veía todo, llegaron dos victorias ante Badajoz (1-0) y sin depender de sí mismo, ganó a la Cultural Leonesa (1-2) y se metió en playoff (1-2). Una promoción de ascenso en la que cayó frente al Villarreal B (3-1), pese a adelantarse.
Con cuatro victorias y cinco derrotas cosechadas en la 2021-22, Félix Revuelta decidió continuar con Aguilá como entrenador. Un nuevo grupo con vistas al Mediterráneo y rivales más difíciles. Y como siempre, es el balón el que dicta sentencia. La liga se inició con empate frente al Nástic (2-2). Derrota frente al Bilbao Athletic (0-1) y victoria ante el Real Unión (0-3). Posteriormente, otro derbi perdido ante la SD Logroñés (1-3). En las dos siguientes jornadas, el equipo triunfó ante el Baleares (1-2) y el Sabadell (3-0). Sin embargo, lo último son dos derrotas: ante Osasuna B (1-0) y Cornellà (0-1).
Foto: Osasuna Promesas
Los números de Aguilá en el presente curso son de 10 puntos de 24, con tres victorias, un empate y cuatro derrotas. Y los demás datos tampoco acompañan: solo en dos partidos se ha dejado la puerta a cero. Salvo en el Stadium Gal, los riojanos no han firmado un partido completo en toda la competición. Y empezar por detrás en el marcador ha significado la derrota en cuatro ocasiones. Solo en una consiguió remontar, ante el Baleares. Más allá de cifras, lo cierto es que el equipo no conecta con la grada. Y el entrenador nunca fue plato de buen gusto.
Ya en verano, el técnico fue cuestionado por gran parte de la masa social de la UD Logroñés. Tras perder el derbi ante la SD Logroñés, ya hubo la primera gran pitada en Las Gaunas. Y ante el Cornellá, el Fondo Sur y otras partes del estadio ya han estallado. “¡Aguilá, dimisión!”, en repetidas ocasiones durante la recta final. Visto este panorama, la doble visita a Alcoyano e Intercity se antoja crucial para su futuro.
