Posiblemente sea uno de los actos más tristes de las fiestas, no por el acto en sí, sino por lo que representa. La Quema de la Cuba ha puesto fin a siete días de auténtica fiesta y de ilusiones renovadas tras volver a vivir una Fiesta de la Vendimia y San Mateo 2022 como la de antaño. Esta vez no ha habido indulto, el fuego ha sido el protagonista. A partir de esta noche, cuenta atrás para las fiestas de 2023.
Una cuba que ha llegado a la Plaza del Ayuntamiento de Logroño en torno a las 22 horas después de que las peñas hayan llevado a cabo su tradicional desfile fin de fiestas por la calle Portales. Una vez reunidos en la plaza del consistorio, las llamas han comenzado a hacerse visibles en un acto que, tal y como anticipaba el concejal de Participación Ciudadana, Kilian Cruz-Dunne, “va a ser lo menos tóxico posible gracias a materiales de combustión menos contaminantes”.
Madera y cartonaje revestido con pintura ecológica ha ardido este viernes donde la lluvia ha respetado uno de los actos más multitudinarios de unas fiestas “históricas en cantidad y calidad” que, como no podía ser de otra forma, se han cerrado con el Himno a Logroño.