Un estudio de UGT ha constatado una mayor lentitud en el descenso del desempleo juvenil respecto a otros grupos de edad, ante lo que proponen diferentes medidas, como el implementar de forma coordinada la Garantía Juvenil.
La asociación juvenil de UGT La Rioja, RUGE, ha presentado el informe ‘Desafíos de la juventud para afrontar un empleo digno’, en una conferencia de prensa en la que han participado la vicesecretaria general de UGT La Rioja, Ana Victoria del Vigo; y la responsable regional de RUGE, Nuria Larrinaga.
“La población joven es un colectivo que siempre sale muy perjudicado con las crisis económicas, por culpa de la pandemia del COVID-19 y la guerra en Ucrania la juventud tiene que luchar todavía más por abrirse camino en un mercado laboral que no les pone un acceso fácil”, ha explicado la vicesecretaria general de UGT La Rioja.
Larrinaga ha constatado que, el número de personas jóvenes en paro -menores de 30 años- ha descendido este año entre los meses de enero a mayo, pero ha aumentado en los últimos tres meses (junio, julio y agosto).
Según sus datos, en enero había 15.324 personas en paro en La Rioja, de las cuales 2.026 eran jóvenes; y en agosto de 2022 había 14. 448 personas en paro, con 1.933 jóvenes, aunque su porcentaje aumentó ligeramente respecto a enero, al pasar del 13,22 a 13,3 %, “lo que supone que el desempleo paro ha bajado más rápido en otros grupos de edad que entre los jóvenes”, ha aclarado la responsable de RUGE.
Además, dentro de ese periodo de tiempo se da la circunstancia de que en mayo el porcentaje de parados jóvenes había descendido al 11,7 y desde entonces subió hasta el 13,3; además ha lamentado que la tasa de actividad es más baja entre los jóvenes de 16 a 25 años, un 40 %, mientras que a partir de los 25 caso dobla esa cifra.
Otro de los datos que arroja este estudio es la diferencia entre hombres y mujeres jóvenes en cuanto a la jornada, ya que los contratos parciales son mayoritariamente de chicas, en concreto 14.600 del total de 18.730 que se registraron, con daros de 2021.
“Hay una creencia equivocada desde ciertos sectores de la sociedad y parte del empresariado, de que la contratación a tiempo parcial beneficia a la juventud bajo el argumento de que así pueden compatibilizar el trabajo con los estudios”, ha considerado Larrinaga.
Ha admitido que “el trabajo de temporada puede ser una opción personal”, aunque “en la mayoría de los casos, la aceptación de estos trabajos se debe a la falta de oportunidades que tiene el colectivo joven para encontrar empleos indefinidos”.
La responsable de RUGE también ha explicado que los trabajadores de menor edad están más expuestos a ciertos factores físicos en sus labores y tienen más accidentes laborales; además también han constatado que los jóvenes son quienes tienen salarios más bajos que la media.
Del Vigo, por su parte, ha realizado diferentes propuestas para mejorar el empleo de los jóvenes, como reforzar la inspección de trabajo, implementar de manera correcta y coordinada la Garantía Juvenil+, y la obligación por ley de cada empresa de dar junto con el contrato de trabajo una copia del convenio colectivo correspondiente.
Además, también ha propuesto revisar y reforzar la causalidad de los contratos temporales, fomentar la jubilación parcial con contrato relevo vinculado a un joven, reforzar los servicios públicos de orientación laboral, continuar con el incremento del salario mínimo y crear una regulación más restrictiva para las empresas multiservicio.
