Durante los meses de julio y agosto han fallecido en las carreteras riojanas tres personas, dos más que en el mismo periodo del año pasado y dos menos que en 2019, año de referencia estadístico, por lo atípico que fue el verano 2020 y 2021 debido a la pandemia sanitaria.
Durante su visita a la DGT en La Rioja, la delegada del Gobierno en La Rioja, Beatriz Arraiz, ha valorado que a pesar de que se han registrado dos víctimas mortales menos que en 2019, “en siniestralidad vial, los datos nunca son buenos si hay fallecidos o heridos graves porque detrás de cada víctima siempre hay un drama que cambia la vida de las personas y de sus allegados”.
Respecto al balance de este verano, los accidentes con víctimas mortales se han producido todos en julio y en vías interurbanas, dos de ellos en la N-232 y otro en la vía autonómica LR-123. Los tres fallecidos son hombres, que conducían dos turismos y una motocicleta. Además, han resultado 14 personas heridas graves durante julio y agosto, dos más que el año pasado y nueve más que en 2019.
En lo que va de año, son nueve las personas que han fallecido en las carreteras en La Rioja, siete de ellas en vías interurbanas y dos en urbanas. Un dato relevante es que dos de esos nueve fallecidos conducían bajo los efectos del alcohol o drogas, que ha afectado directamente como causa directa, y tres iban sin cinturón de seguridad.
Por ello, la Jefa Provincial de Tráfico en La Rioja, Beatriz Zúñiga Reinares, ha insistido en que el “binomio de alcohol y drogas con la conducción o no utilizar los sistemas de seguridad en los vehículos es algo que nos preocupa y en lo que seguiremos trabajando”.
Las víctimas mortales ascendieron a 10 durante todo 2021 y a 18 en el año 2019.
