Cáritas abre este sábado en Alfaro su dispositivo de atención a temporeros que llegan a trabajar en la vendimia y apela a impulsar los contratos de origen a estos trabajadores. La previsión es que el dispositivo de Cáritas Parroquial en Alfaro permanezca operativo hasta el 30 septiembre, aunque la fecha puede variar según progrese la vendimia y la llegada de trabajadores a la zona.
Este dispositivo cuenta con 24 voluntarios que se encargarán de cocinar, realizar la acogida, registrar las atenciones, preparar y entregar las bolsas de alimentos y atender posibles solicitudes de ropa. La entidad también ha afirmado de que la mejoría sanitaria ha permitido flexibilizar el protocolo COVID-19 respecto al año anterior, pero por cuestiones higiénicas se seguirá sin ofrecer el servicio de recogida de equipajes, consigna y duchas. Por ello, en cada bolsa se entregará el desayuno, comida y cena y, además, un kit de higiene personal.
El responsable de Integración Social de Cáritas en La Rioja, Joaquín Yangüela, ha detallado que “en los últimos años, gracias a la implicación y concienciación de numerosos agricultores y empresas bodegueras, las condiciones de los temporeros han mejorado”. Sin embargo, “debemos seguir revindicando sus derechos y denunciando problemas que siguen sin resolverse”, ya que “la explotación laboral, la precariedad social y las vulneraciones de los derechos básicos, desgraciadamente, siguen presentes”, ha indicado.
Por ello, la entidad social ha recordado que los trabajadores temporeros tienen derecho a que el empleador les proporcione un alojamiento digno, así como las herramientas y desplazamientos necesarios para desempeñar su trabajo. Además, su jornada laboral debe contar con descansos y cumplir con el salario establecido por el convenio laboral.
Por ello, Yangüela ha hecho un llamamiento a la Administración para que los temporeros sean atendidos desde “Empleo en vez desde los Servicios Sociales, ya que no son personas sin hogar sino trabajadores”. “Cáritas siempre estará donde haya personas que no tengan cubiertas sus necesidades básicas, pero lo deseable es que nuestra labor y la de nuestros voluntarios no sea precisa cada vez que empieza una campaña agrícola”, ha precisado. Ello se puede lograr, ha añadido, “respetando todos los derechos y con medidas como potenciar la contratación en origen”.
Con ello “se evitará el desplazamiento innecesario de personas que hacen grandes esfuerzos para llegar a nuestra región y después no logran encontrar empleo, dando lugar a situaciones indeseadas como la aparición de asentamientos donde no se cumplen las condiciones mínimas de salubridad y seguridad”, ha afirmado.
