La Mesa de la Cámara ha aprobado este jueves la expulsión de la diputada Raquel Romero del Grupo Mixto tal y como lo había solicitado la diputada de Izquierda Unida, Henar Moreno. Así, con los votos favorables del PP y de Izquierda Unida, la diputada y consejera deja de formar parte del Grupo Mixto que conformaba con Izquierda Unida y de tener determinados medios que le proporcionaba la Cámara como un asesor a jornada completa y otro a media jornada y el despacho donde éstos trabajaban. Esto supone que pasará a ser una diputada no adscrita, una situación similar a la que sucediese en la pasada legislatura con la diputada Rebeca Grajea (Cs).
En la reunión de la Mesa, los integrantes del grupo socialista han solicitado, tal y como se aconsejó por parte de los servicios jurídicos de la Cámara, la realización de un certificado por escrito de la expulsión de la diputada de su partido y por lo tanto su condición de tránsfuga y que se elaborase un informe jurídico por estos mismos servicios para ver el encaje legal de la situación, algo que tanto PP como Izquierda Unida no han considerado necesario.
El presidente del Parlamento riojano ha indicado que él ha planteado que la votación se trasladara a la Mesa de mañana por “garantías jurídicas”, con el fin de que los Servicios Jurídicos de la Cámara presentaran un informe y que Podemos aportara una certificación de la expulsión de Romero de esta formación política. Una propuesta que no ha sido aceptada por el PP ni por Moreno, por lo que se ha acordado que Romero salga del Grupo Mixto y sea considerada como diputada no adscrita. En el turno de votaciones, el PSOE se ha pronunciado en contra por “una cuestión de forma”.
Las consecuencias
“En la práctica no es un tema que tenga gran trascendencia porque, al formar parte del Gobierno, la diputada Romero en raras ocasiones participa en el Pleno y en las comisiones en su condición de diputada”, explicaba a NueveCuatroUno Jesús María García, presidente del Parlamento.
Eso sí, su asignación económica se verá modificada y perderá la posibilidad de tener ese asesor a jornada completa y otro a media jornada. “Esos puestos pertenecen al grupo Mixto y ahora Izquierda Unida podría utilizar esos medios que le proporciona la Cámara”.
El reglamento establece que cada diputado, como mínimo, debe formar parte de dos comisiones parlamentarias, por lo que, a partir de ahora, puede producirse algún cambio respecto a Romero, que ya pertenece a algunas.
De momento, la diputada Henar Moreno, se remite a la resolución que tienen que realizar los servicios jurídicos del Parlamento y que luego tendrá que ratificar la Mesa del Parlamento y a los trámites que se llevaron a cabo con la situación, en la legislatura pasada, de Rebeca Grajea de Ciudadanos. “De momento nosotros no vamos a hacer nada más, esto no es una cuestión de medios sino de dignidad y coherencia”, decía esta misma mañana.
