Cinco botellas de litro o una garrafa. La guerra de Ucrania ya ha llegado a los supermercados de La Rioja. Lo mismo pasó con el papel higiénico allá por marzo de 2020. Más que el alza de los precios, el comportamiento de los consumidores ha hecho que varias cadenas de supermercados hayan decidido limitar la venta del aceite de girasol, según explican fuentes de algunos de sus responsables.
La situación no se debe al desabastecimiento de aceite de girasol, ya que la Asociación Española de Distribuidores, Autoservicio y Supermercados (ASEDAS) asegura que no la hay, sino que se ha tomado con el objetivo de evitar que determinados clientes hagan acopio de un producto que se está viendo afectado por la invasión rusa en Ucrania.
Así, desde ASEDAS explican que “se han tomado estas medidas de limitación de venta debido al comportamiento atípico de los consumidores en las últimas horas ya que la demanda anómala afecta a un número muy limitado de productos relacionados con el aceite de girasol procedente de Ucrania y existen alternativas tanto de origen como de producto”.
Además, la asociación recuerda que España es “primer productor mundial de varias de las familias de productos que componen las categorías de grasas vegetales y que la cadena alimentaria española es extraordinariamente eficiente y tiene suficiente capacidad para proveer al mercado de dichos productos”.
Con los precios del aceite de girasol en máximos y la venta limitada en algunos supermercados, parece el momento ideal para seguir apostando por el aceite de oliva. Y si es riojano, mejor que mejor.
