Eduardo Palacios.- El BM Logroño regresa este martes a los entrenamientos para preparar una exigente segunda vuelta, en la que quiere mejorar su actuación en la primera parte de la liga y pasar de fase en la Liga Europea.
En su regreso al trabajo, el equipo de Miguel Ángel Velasco se ha topado con otro percance a consecuencia de la pandemia, ya que tres efectivos -entre jugadores y cuerpo técnico- de la plantilla han dado positivo por COVID en el cribado previo al primer entrenamiento. Según detalla el club, los afectados “se encuentran bien y asintomáticos”.
El técnico tampoco podrá contar con Agustín Casado y Leo Dutra, concentrados con las selecciones de España y Brasil, respectivamente. Además, Eduardo Cadarso está ya en la recta final de la recuperación de su lesión y Leo Tecariol también avanza de forma satisfactoria.
Así lo ha explicado a Efe el entrenador de los riojanos, que da por superado el “disgusto” de acabar la primera parte de la temporada con dos derrotas consecutivas (en Copa y liga) en Cangas del Morrazo, a donde el equipo acudió bajo mínimos por lesiones y por la pandemia. En el global de la primera parte de la temporada “hay más cosas buenas que malas”, asegura Velasco, quien recuerda que cuenta con la segunda plantilla más joven de España y, “aún así, salvo en un partido, hemos competido bien en Europa y eso tiene muchísimo mérito”. Cuando se reanude la competición, el Logroño deberá ratificar su buen papel hasta ahora y pasar de ronda.
En la Liga Asobal, “quizás, hemos perdido algún punto más de lo que esperábamos”, admite Velasco al recordar que su equipo finalizó con 10 triunfos y 5 derrotas, “algunas en campos en los que no era previsible”, pero “por el contrario, también hemos ganado en sitios difíciles”.
“Un diez al equipo”
“A mi plantilla le doy un diez en la primera vuelta, tiene mucho mérito lo que hicimos con la situación que hay por la pandemia, las lesiones y el ritmo frenético de algunas semanas”, subraya el entrenador, que alude a cómo estuvieron varias semanas con un solo portero y luego encadenaron las lesiones de larga duración de Almeida y Eduardo Cadarso. Por eso, “creo que hemos cumplido con creces” y, aunque “lo que me gustaría es, como otros años, ir a más en la segunda vuelta, sé que no va a ser fácil”, advierte.
Para ello, desea que “nos respete el COVID”, como “en la mayor parte de la primera parte”, aunque asume que, “tal y como está la situación de la pandemia, creo que a todos nos tocará sufrir”. A su favor, “al menos unas semanas”, tiene que el equipo no jugará la Copa del Rey tras ser eliminado en Cangas, “donde hicimos un esfuerzo titánico porque queríamos pasar”, pero, “tal y como llegamos allí, no se les puede exigir más a los jugadores”, asegura el preparador, que recuerda que “llevamos años sin suerte” en la Copa.
A Velasco le toca la tarea de “administrar” a su plantilla para llegar bien a los partidos más importantes, aunque él no está conforme con ese papel “porque no tengo un equipo que pueda ir de menos a más, tenemos que dar el cien por cien desde el principio”, ya que “si especulas, pierdes”.
El propio técnico respalda la decisión de su club de no jugar amistosos durante este mes para “preservar un poco la burbuja”, aunque reconoce que “eso nos puede llegar a pesar un poco al principio”.
Por otro lado, durante las vacaciones se ha hecho público el fichaje, la próxima temporada, del internacional Agustín Casado por el Meshkov Brest de Bielorrusia, con lo que el Logroño perderá a su mejor jugador esta temporada, “algo a lo que ya estamos acostumbrados”, ha admitido el entrenador.
Por un lado, “es triste perder a un gran jugador”, pero “me alegro porque significa que ha evolucionado y que nosotros seguimos haciendo un buen trabajo con los jóvenes” que salen a equipos punteros en Europa.
“Ya ha pasado más veces y simplemente tenemos que aceptar que no podemos tener la estabilidad que nos gustaría y que hay que empezar con otros jugadores”, ha concluido Velasco, quien ha admitido que tiene “avanzado” el fichaje de un sustituto, aunque no lo hará oficial todavía.
