La SD Logroñés ha empatado frente a Unionistas de Salamanca (3-3), en la fiesta del fútbol popular. Los locales se han adelantado por 2-0, pero Emilio Lozano y Mario Soberón han conseguido empatar el choque. Jesús de Miguel ha adelantado a los locales y Jon Ander ha vuelto a poner las tablas definitivas. Buen ambiente en las gradas, ya que el conjunto salmantino optó por no poner precio a las entradas, dejando que el aficionado pagara lo que quisiese. El choque entre el primer y segundo clasificado no podía tener más alicientes. Una locura sobre césped artificial.
Los salmantinos han saltado mejor, con ocasiones de Cris Montes y Pablo Espina, con las aficiones hermanadas desde el primer segundo. En el campo mucha pelea e intensidad de los castellanoleoneses, aprovechada para abrir brecha en el marcador. Tras dos avisos de Nespral, Ramiro ha rematado a gol un centro desde la bandera derecha. Y dos minutos después, Cris Montes ha disparado con violencia dentro del área, encontrando el segundo y poniendo las cosas muy complicadas para los riojanos. Rápidos y eléctricos, los locales estaban marcando la diferencia
Pintaba feo el asunto para los pupilos de Raúl Llona, cuando Emilio Lozano se ha inventado una obra de arte. Falta lateral desde veinticinco metros y misil del logroñés directo a la escuadra. Imparable para Salva de la Cruz y energías nuevas para los visitantes. Unionistas quería controlar el centro del campo, mientras la SD Logroñés intentaba dar un paso hacia adelante. Caía la noche y la iluminación no era la mejor en Salamanca. Suficiente para jugar al fútbol en el Reina Sofía, pero más difícil para los televidentes
Foto: Unionistas de Salamanca
Corría el cronómetro y Raúl Llona quería soluciones desde el banquillo. Calderón ha entrado de cara a la segunda mitad y Jon Ander poco después. Los argumentos estaban sobre la mesa y a falta de veinte minutos, Soberón ha colocado el empate. Poco le ha durado la alegría a la SD Logroñés, porque Jesús de Miguel ha puesto el 3-2 casi seguidamente, desatando la auténtica euforia en la parroquia local. Lejos de rendir a los de Logroño, el tanto ha provocado una reacción espectacular.
En ese punto, el partido ya era una auténtica locura. Y Jon Ander, dentro del área, ha vuelto a demostrar su gran olfato goleador para empatar a 3. La fiesta en el graderío se había trasladado al campo, donde los ataques se comían a las defensas y no había ni un solo ápice de táctica u orden. Imprevisible, cardíaco, pongan la palabra que quieran; el frenesí no se detenía y la SD Logroñés veía incluso posibilidades de victoria.
Después de 95 minutos luchando como jabatos, las tablas parecían justas visto lo visto en el campo. Si la Primera RFEF suele consistir en partidos con pocos goles, éste ha roto todos los pronósticos. Un punto para cada uno y ambas hinchadas contentas. La SD Logroñés suma dieciséis puntos y es sexta, rozando los puestos de playoff. La próxima cita para los blanquirrojos será recibir al Bilbao Athletic en Las Gaunas (domingo 12:00).
