Toros

La suerte que esquivó a Urdiales y desbordó a Ferrera

FOTOS: Eduardo del Campo.

A la corrida de Zalduendo le ha faltado fuerza. ¡Oh, sorpresa! ¡Quién nos lo iba a decir! Toro y medio sirvieron. El tercero, ‘Caballa’, que pese a ser lunes y no ser día de pescado, embistió con una frescura sorprendente, clase inaudita, son insólito y ritmo extraordinario. El que medio se dejó fue el quinto, ‘Neblina’, que tuvo transmisión y duración. Pena que no le tocaran en suerte a Urdiales o rabia de que sí le fueran a parar a manos de Ferrera, ustedes mismos.

Diego Urdiales, en la segunda de San Mateo. | FOTO: Eduardo del Campo

El cinqueño encierro de ‘Zalduendo’ tuvo cuajo, remate y cara. Más ofensivo fue segundo; de expresión más torera el tercero y más bastote el primero. Volvían los pitones el resto, seña de seriedad. A todos se les cuidó en el caballo y el que no echó las manos por delante, terminó claudicando en la arena. Los destacados anteriormente se vinieron arriba en el último tercio y ofrecieron muchas posibilidades.

Antonio Ferrera, en la segunda de San Mateo. | FOTO: Eduardo del Campo

Lo peor es que la ganadería pertenece a la empresa y me temo que habrá ‘Zalduendo’ para rato en Logroño. Y peor aún que cada vez se notará más la ausencia de Fernando Domecq, quien realmente sabía de esto allá en Moheda de Zalduendo.

Que ‘Caballa’ perdiera las manos en el inicio nos privó del remate en el saludo capotero de Ferrera. Cuidado en el caballo, adonde el extremeño lo llevó por chicuelinas al paso, el toro apenas se empleó. Hubo desmayo en el inicio de la faena a pies juntos. Tan pronto era el toro como tardo Ferrera en ver aquel pitón izquierdo de ensueño que regalaba embestidas excelsas y dormidas a partes iguales.

Antonio Ferrera, en la segunda de San Mateo. | FOTO: Eduardo del Campo

Dio sitio Ferrera al tiempo que recorría la práctica totalidad de ‘La Ribera’ con ‘Caballa’ fijo y obediente en su muleta. Asida la muleta por el extremo, parecía como si el extremeño no terminara de confiarse en aquella empresa fácil y segura. El basto circular anunció una nueva embestida larga y templada por el pitón bueno. Fue a montar la espada, pidieron el indulto unos pocos y hasta la música volvió a la carga. Que no, que no, que lo mato pareció decir. Y sí, a la suerte contraria, como si pareciese no haberse enterado de nada, se perfiló para cobrar una estocada baja.

Antonio Ferrera, en la segunda de San Mateo. | FOTO: Eduardo del Campo

De largo colocó al que hizo quinto, que acudió alegre al caballo. Ya antes había dado muestra de su escasa fuerza y señalaron un segundo encuentro con el caballo. Un muy buen tercio de banderillas protagonizaron Javier Valdeoro y Fernando Sánchez, que se desmonteraron.

Antonio Ferrera, en la segunda de San Mateo. | FOTO: Eduardo del Campo

De mucho ritmo fue la primera serie por el pitón derecho. Menos recorrido tenía el de ‘Zalduendo’ por el izquierdo y a menos fueron toro y torero. El letal metisaca afeó más otra obra que pudo ser y no fue.
Brindó Ferrera a Urdiales su primero, que le tocó las telas demasiadas veces. Uno de pecho a la misma hombrera vino a certificar el toreo rectilíneo y nada reunido. La estocada cayó contraria.

Diego Urdiales, en la segunda de San Mateo. | FOTO: Eduardo del Campo

Sin que hubieran cesado las palmas con las que se recibió la buena presentación del primer toro de Urdiales, este ya había perdido las manos… Tan protestado fue como cuidado en el caballo. Su prolongado cuello merecía mantenerlo en el ruedo. Y ni aún así. Largo embestía por el pitón derecho, pero sin apenas fuerza. Distraída era la acometida por el izquierdo. Mérito tuvo el final por el derecho y más la estocada.

Diego Urdiales, en la segunda de San Mateo. | FOTO: Eduardo del Campo

Se repuchó de salida el cuarto, que fue suelto al caballo. Breve fue el segundo encuentro con el picador. Poco y nada duró en la muleta de Urdiales. Más o menos como el sexto, que, tras sacar pies y genio en banderillas, se sintió muy podido por el inicio mandón del riojano. Basta dijo. Tres verónicas de genial trazo y temple pudo conseguir Urdiales, a la cuarta, el toro se volteó.

Diego Urdiales, en la segunda de San Mateo. | FOTO: Eduardo del Campo

¡Qué rabia no poder certificar en Logroño lo hecho meses atrás en Burgos, Santander, Mont de Marsan, Gijón, Colmenar…! A ver mañana.

SEGUNDA DE FERIA

Plaza de toros de La Ribera, en Logroño (La Rioja). Segunda corrida de la Feria de San Mateo. Media entrada, de acuerdo con la limitacion de aforo. Toros de Zalduendo, bien presentados y serios. El 1º, noble, pero agarrado al piso; el 2º, bueno, pero medido de fuerza; el 3º, gran toro, de mucha clase; el 5º, noble; 4º y 6º, deslucidos.

• ANTONIO FERRERA, ovación, oreja y ovación.

• DIEGO URDIALES, ovación tras petición, palmas y palmas.

Incidencias: En banderillas, se desmonteraron, Javier Valdeoro y Fernando Sánchez.

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