La pensión media que reciben los jubilados en La Rioja representa el 68,35 por ciento del salario medio que perciben los trabajadores en 2021. A nivel nacional la cifra se sitúa en el 62,16 por ciento, una tasa que ha mejorado 12 puntos en la última década. Así, mientras que las pensiones de jubilación se han revalorizado en los últimos diez años un 30,29 por ciento, los salarios, pese a ser más elevados, solo han crecido un 4,85 por ciento.
Un trabajador riojano actualmente cobra de media 1.660,97 euros mensuales (1.907,82 de media nacional), según el dato más reciente -del primer trimestre- del Instituto Nacional de Estadística (INE), mientras que un jubilado recibe 1.134,69 euros al mes como pensión (1.185,81 de media nacional).
El sueldo neto es el coste salarial por trabajador y mes en el que incurre un empleador y comprende el salario base y otros complementos, los pagos por horas extra y otros pagos extraordinarios o atrasados, según la Encuesta Trimestral de Coste Laboral.
Este dato se ha incrementado un 4,85 % respecto al registrado unos diez años antes, en el primer trimestre de 2011, cuando el salario medio mensual ascendía a 1.819,62 euros. Por su parte, la pensión media mensual que recibe un jubilado se ha incrementado un 30,29 % desde los 910,11 euros de marzo de 2011, teniendo en cuenta los datos consultados del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones.
La pensión de jubilación se calcula teniendo en cuenta la base reguladora (media de las bases de cotización) de los últimos 15 años del trabajador, hasta que entró en vigor la reforma del sistema de pensiones en 2013. A partir de entonces, este periodo va aumentando año tras año para alcanzar los 25 años en 2022, si bien en 2021 ya se computan los últimos 24 años trabajados.
No obstante, hay que tener en cuenta que la pensión máxima tiene un tope, que en la actualidad es de 2.707,49 euros mensuales y que diez años antes era de 2.497,91 euros al mes. Por eso, la pensión media es inferior al salario medio y suponía el 62,16 por ciento en marzo de 2021, una tasa que no obstante se ha incrementado respecto al 50,02 por ciento de diez años antes.
Y es que, mientras los salarios se han mantenido congelados, han sufrido recortes o, como mucho, ligeros ascensos, las pensiones han experimentado un alza seis veces superior, porque a lo largo del periodo la revalorización de las pensiones ha sido mayor, pero sobre todo porque en esta década han ido entrando al sistema de pensiones más altas.
Aunque en 2011 estuvieron congeladas y entre 2014 y 2017 subieron un 0,25 por ciento, las pensiones de jubilación han experimentado alzas del uno por ciento otros años y superiores al 1,5 por ciento en 2018 y 2019. En la actualidad, los datos de la cobertura de la pensión sobre el salario oscilan de una región a otra y pasan del 75,95 por ciento de Asturias, al 58,38 de Madrid.
Las tasas en el resto de las comunidades se distribuyen así: Aragón (69,48 por ciento), Baleares (66,75), Canarias (75,02), Cantabria (71,91), Castilla y León (69,42), Castilla-La Mancha (65,99), Cataluña (59,37), Comunidad Valenciana (62,74), Extremadura (64,71), Galicia (59,12), Murcia (62,77), Navarra (66,18) y País Vasco (64,42).
Esto se debe a que en Asturias, la pensión media es de 1.426,32 euros y el salario asciende a 1.878,01 euros, mientras que en Madrid los jubilados perciben 1.384,13 euros y los trabajadores ganan 2.371,05 euros mensuales de media.
En la actualidad, el mayor salario medio lo registra Madrid, seguida por el País Vasco (2.259,42), Cataluña (2.033,09) y Navarra (2.023,81), mientras que los menores los perciben en Canarias (1.467,82) y Extremadura (1.520,68).
En cuanto a las pensiones, las más elevadas están en el País Vasco (1.455,45 euros mensuales), Asturias (1.426,32), Madrid (1.384,13) y Navarra (1.339,39), y las más bajas en Extremadura (983,99) y Galicia (999,61).
Y la situación apenas ha variado en la última década, ya que por entonces ya eran los trabajadores madrileños, vascos, catalanes y navarros los que mayores salarios percibían de media, y los canarios, sumados a los extremeños, los que menos recibían.
Lo mismo ocurría con las pensiones de jubilación. Hace diez años eran los vascos, asturianos, madrileños y navarros los españoles con una mayor pensión de jubilación en contraposición de los gallegos y extremeños, que recibían las menores.
