La organización ecologista Amigos de la Tierra ha presentado una denuncia ante el Seprona de la Guardia Civil para que investigue la derivación del cauce del río Leza en Ribafrecha para derivar agua a una acequia de regadío.
Según ha explicado esta organización en un comunicado que recoge Efe, la denuncia se sustenta en que en los últimos días han observado como el cauce del Leza aparece “prácticamente seco” en algunos puntos y han comprobado como hay “grandes cantidades de peces muertos debido a la escasez de oxígeno”.
Los puntos donde se observó el río de esta forma se encuentran en Ribafrecha, Murillo de río Leza y Agoncillo.
Ayer mismo, precisan, comprobaron cómo en el puente Laidiez (frontera entre los términos municipales de Leza de río Leza y Ribafrecha) se está derivando la totalidad del caudal hacia una acequia, quedando el río sin aporte de agua y se observa cómo la presa aparece seca.
Esta organización incide en que el bajo del río Leza es uno de los tramos bajos de ribera mejor conservados de La Rioja, con presencia de especies que han desaparecido en otros ríos, como la lamprehuela o el barbo de Graells. Por ello, este hecho implica un impacto “gravísimo” para todo el tramo bajo del río Leza, al privar al río del agua, pilar fundamental sobre el que se apoya todo del ecosistema porque “no se respeta el mínimo caudal ecológico que permite compatibilizar los usos humanos del agua con el mantenimiento de las funciones del ecosistema y la vida de las especies ligadas al mismo”.
“Nos preguntamos para qué sirve la Directiva Marco del Agua, que busca el buen estado ecológico de los ríos, embalses como el de Terroba, que prometieron con su construcción que iba a garantizar caudales ecológicos, la guardería de la Confederación Hidrográfica del Ebro o la Consejería de Transición Ecológica y Sostenibilidad”, critican por último.
