El EDF Logroño ha ganado ante el Granadilla (2-1), rompe su racha de seis derrotas consecutivas y se agarra a la categoría. Un penalti transformado por Jade, en el tiempo de descuento, ha dado una alegría enorme a las riojanas, a falta de cuatro jornadas para el final. El asunto sigue siendo muy complicado, porque las de Javier Moncayo tienen 22 puntos y están a siete puntos de la permanencia, marcada ahora por el Rayo Vallecano, con 29.
Las logroñesas, sin mucho ya que perder, han salido a por todas. Todo ha empezado muy mal y las canarias, sin hacer demasiado, se han puesto por delante. María José Pérez ha rematado a las mallas una gran jugada colectiva. Pintaba todo negro, pero Rebecca Elloh ha conseguido dar un punto de esperanza. Gran jugada de la africana, que se ha internado en el área, ha driblado a la portera visitante Aline y a placer, ha logrado empatar el choque.
Rebecca Elloh, en la acción del gol / Foto: LaLiga
Alegría y gritos de ánimo en unas gradas que querían acompañar a los suyos hasta el final. Pero claro, en el verde había un rival fuerte. Granadilla, pese a estar casi descartado de la pelea por Europa, no ha venido a La Rioja precisamente de turismo. Martín Prieto ha ganado una carrera a Marta Cazalla y Pamela Tajonar ha sacado un gol cantado. Las tinerfeñas llevaban peligro en cada jugada, aprovechándose de la inseguridad defensiva de las anfitrionas.
Las tablas no les valían a las riojanas, que han reforzado su ataque con la entrada de Jade y Chini, buscando la victoria para agarrarse a la élite. Al dejar espacios debido a sus urgencias, el encuentro ha mutado en un toma y daca. Ocasiones muy claras para las logroñesas: zapatazo de Lova Lundin a córner y otra jugada de penalti no pitado al EDF Logroño, tras un disparo de Jade y la mano de una blanquiazul. A pesar de las súplicas de las riojanas, la colegiada no lo ha señalado.
El EDF Logroño defiende una acción frente al Rayo Vallecano / Foto: LaLiga
Corría el cronómetro, cada vez más en contra de las locales. Último largo cuarto de hora para Cynthia. Y para quemar las naves, Judith Luzuriaga y Fishley. Cuando todo parecía perdido, una jugadora canaria ha derribado a Jade. Pena máxima clara, transformada por la vallisoletana en el tiempo añadido. Y alegría merecida para un equipo que había sufrido muchísimo.
Las logroñesas viajarán el próximo fin de semana a Santa Teresa, en busca de otro triunfo que les meta de verdad en la batalla por la salvación. Tienen que remontar siete puntos hacia la permanencia y todo sigue estando muy difícil, pero todavía es posible.
