Rubén Pardo (Rincón de Soto, 22 de octubre de 1992) es una de las principales bazas del Leganés y se enfrenta en Butarque al Logroñés, el equipo de su tierra (domingo 21:30). Un duelo especial para el rinconero, canterano de la Real Sociedad y ahora cedido por el Girondins de Burdeos en uno de los equipos top de LaLiga SmartBank. El conjunto pepinero descendió la temporada pasada y su objetivo no es otro que recuperar la máxima categoría.
El centrocampista ha expresado sus sensaciones en Radio Rioja, ante un choque especial: “Sigo mucho al Logroñés porque es el equipo de mi tierra y obviamente quiero que se salve, porque tanto La Rioja como Logroño se merecen un equipo en el fútbol profesional. Espero que les vaya todo bien en estos partidos que le quedan”. El panorama se ha vuelto más imprevisible: los equipos de abajo están compitiendo y ganando a los de arriba.
Pardo lo sabe y ha valorado el choque frente a los blanquirrojos como un “partido bonito a cara de perro”. Inmersos en la batalla por el ascenso, los madrileños son cuartos (63 puntos). Más agónico será el último mes para el Logroñés, porque los de Sergio Rodríguez han caído al descenso por primera vez en seis meses (41). Una batalla que Pardo ha conocido, sobre todo en sus primeras etapas en Donosti: “Al final, tienes que darlo todo y sales a morir todos los minutos que estés en juego”.
Rubén Pardo celebra un gol en Butarque / Foto: LaLiga
El rinconero permaneció más de una década en las instalaciones de Zubieta, donde coincidió con Sergio Rodríguez: “Coincidí con él en algún entrenamiento, porque hubo una temporada que nos estábamos sacando el primer o segundo nivel de entrenador”. El mediocampista acumula casi doscientos partidos en Primera e incluso competiciones europeas, pero nunca había jugado en Segunda.
Pardo ha tratado de explicar el momento actual de la UD Logroñés: “Después de muchos años en Segunda B, el equipo ha dado ese pasito. El primer año es complicado, como siempre le pasa a cualquier equipo que sube a una categoría superior. Ha habido tramos donde ellos han tenido ese puntito de suerte; los rebotes les caían a favor, marcaban goles y ganaban. Ahora están en un momento donde quizá no le cae el balón hacia su lado y quieren cortar esa racha lo antes posible, para salir del pozo”.
No habrá espacio para sentimentalismos, porque los de Butarque se juegan demasiadas cosas. El playoff de ascenso está casi asegurado, no así el puesto final. A falta de cuatro jornadas, el Almería (66) es tercero, el Leganés cuarto (63), el Sporting quinto (61) y un Girona on-fire, sexto (61). Las eliminatorias emparejan a los mejor clasificados con los que peores y además, no tienen penaltis. El mejor clasificado avanza tras la prórroga. Ser tercero tiene su importancia en el camino a Primera.
Pardo posa con el Trofeo de Mejor Jugador del Mes en febrero / Foto: LaLiga
Para ello contarán con una escuadra de lujo: “Tenemos una plantilla muy amplia, con jugadores que hemos estado en Primera División. Tuvimos el otro día la mala suerte que Omeruo y Arnaiz tuvieron un pequeño percance y no van a poder estar. Pero estamos muchos otros jugadores a un gran nivel y esa es la ventaja: estamos preparados para cualquier partido donde nos ponga el míster”.
Más personalmente, Pardo ha valorado positivamente su etapa en el Leganés: “Bajar a Segunda puede ser un paso hacia atrás para muchos. A mí, para nada; me ha servido para reforzarme mental y futbolísticamente. Quedan cuatro partidos y llevo 34 jugados. Es lo que buscaba: volver a sentirme futbolista, disfrutar el día a día, entrenar, irme a casa tranquilo y si tenía la suerte de jugar, hacerlo lo mejor posible. He disfrutado de esta temporada y espero ponerle la banderita del ascenso”.
Un futbolista de categoría que quiere volver por sus fueros. Algo está claro, el riojano es un auténtico as en el lanzamiento de falta. Tres dianas a balón parado frente a Las Palmas (24 de enero), Lugo (1 de febrero) y Albacete (14 de febrero) para ayudar a su equipo a completar un mes de febrero pletórico y ganar el trofeo a ‘MVP’ de ese mes. Cuando ejecuta un libre directo, siempre hay peligro. Así que más le vale al Logroñés tener cuidado…
