No por sabido o previsible deja de ser duro el momento de decir adiós a un club en el que un futbolista ha dado sus primeros pasos hasta alcanzar el fútbol profesional. Ese amargo trago es el que le ha tocado beber a Álvaro Arnedo en su adiós al Logroñés, que este lunes le daba la baja al cierre del mercado invernal de fichajes.
El centrocampista riojano, que ha firmado por el Portugalete, se despedía de la afición blanquirroja a través de las redes sociales: “No es el día ni el momento que hubiese elegido, pero ha llegado”. Arnedo asegura que “hoy cierro la etapa más bonita y, a su vez, más triste y dura de mi carrera futbolística. Es difícil explicar el sentimiento contradictorio que siento en estos momentos. (…) No es la mejor maneras para despedirse, pero dadas las circunstancias tengo que hacerlo a ti”.
En su mensaje de despedida, el jugador recuerda que “llegué con 13 años, regresé con 17 y he formado parte de todas y cada una de las categorías que componen este club hasta asentarme en el primer equipo. Son tantísimos los momentos que hemos vivido juntos… no tengo 90 minutos para poder comprimirlos”.
Álvaro Arnedo defiende una acción en Son Moix, contra el Mallorca. | FOTO: LaLiga
Arnedo agradece “a las personas y aficionados que me han apoyado en todo este camino, en los que he sentido su cariño y respeto, en los buenos momentos y en los no tan buenos. Lamento no haber tenido la oportunidad de devolveros esta deferencia”.
No obstante, de las palabras del futbolista riojano se desprende cierto malestar con el que ha sido, hasta ahora, su club: “Hasta aquí, pues hace ya mucho tiempo que alguien me dijo que valgo más por lo que callo que por lo que hablo; mi lucha es otra”.
