Deportes

El Villa de Quel, fútbol sala con denominación de origen en Segunda B

Foto: AD Villa de Quel

El Villa de Quel hizo historia al ascender este pasado verano a Segunda División B, tras vencer al Ribafrecha en una apretada final (3-4). Un pueblo de 2.000 habitantes disfruta de la tercera categoría del fútbol sala y la expectación es notable. Con un equipo formado exclusivamente por jugadores riojabajeños, sin retribución económica y mucho trabajo detrás, el bloque ha conseguido cuatro victorias consecutivas y es líder en el Subgrupo 2B. Un pequeño milagro deportivo que ha convertido al bloque en la referencia de la especialidad masculina en La Rioja.

Javier Villarroya nació en el municipio, entrena al club y pertenece a la entidad desde su creación (hace seis años): “Ya es mi tercera temporada, llevaba dos años en Tercera y por fin, conseguimos ascender. Tener al equipo en Segunda B supone una alegría enorme, somos un pueblo muy pequeño y no hay otra cosa. Estamos muy ilusionados y lo hemos conseguido gracias al trabajo que hay aquí, entre directivos, aficionados y sobre todo, la plantilla que tenemos. Al final, es la base de otros años con cuatro fichajes o cinco”.

Foto: AD Villa de Quel

“Aquí todo el mundo juega gratis, no podemos pagar a nadie”, explica. La plantilla al completo es riojana, con el capitán, el delegado y el propio entrenador naturales de Quel: “El delegado era jugador y lo dejó; otro chaval y un par de juveniles tuvieron que dejarlo por irse a estudiar fuera. El resto de jugadores son de Arnedo prácticamente, dos de Alfaro, tres de Calahorra y uno de Igea. Intentamos no traer a gente de fuera, porque queremos que la gente se involucre en la plantilla, algunos jugadores ya tienen novia aquí y son uno más”.

Muchas cosas han cambiado en seis años, cuando los jugadores del pueblo que habían jugado al fútbol decidieron montar un equipo, aprovechando el nuevo Polideportivo Municipal de la localidad (inaugurado en 2014). Villarroya formó parte del bloque desde el inicio: “Estaba de jugador dos años en Tercera, un año de delegado, mientras me sacaba el título de entrenador y ya acabé entrenando”. Con la pandemia del coronavirus, la situación económica se ha complicado todavía más: “Este año era viable jugar, pero los gastos nos están yendo. Los jugadores son gratis, pero los entrenadores no”.

“Queremos aprender y disfrutar de la categoría, poder decir que hemos competido de tú a tú frente a todos, que yo valgo para estar en Segunda B. Me gustaría dejar al equipo en Segunda B, para que cuando esto se solucione, que la gente pueda ir a las gradas. Lo echamos por Facebook/Youtube, pero no es lo mismo; llevamos un par de años en Tercera y la grada se llenaba. Es una pena que este año que estamos en Segunda B no lo tengamos, porque sería un ambientazo por todo lo alto”.

Javier Villarroya, el quinto por la izquierda en la fila inferior, posa junto a su equipo / Foto: AD Villa de Quel

Juan Carlos García es el presidente y además, ejerce como concejal de Deportes en la localidad: “Para un pueblo tan pequeño, haber creado la entidad hace seis años, haber ascendido en dos categorías cuando jugábamos en Tercera, es un impacto espectacular. Al ascender, el presupuesto se ha llegado a triplicar o cuadruplicar; tenemos entre 25.000 y 30.000 euros con pago de fichas, entrenamiento, fichas, ropa y arbitrajes (en esta categoría, son el doble).

Para poder lograr todo esto, el club se nutre de patrocinadores pequeños, ya sea en la camiseta, en la ropa de calentamiento o en la de entrenamiento: “Es muy complicado mantenerse en esta categoría. En otros sitios, les dan 20.000 euros. Ahora mismo somos el único equipo riojano en Segunda División B, a ver si conseguimos alguna empresa fuerte que nos apoya. Desde la Federación Riojana y el Ayuntamiento de Quel también recibimos ayuda”.

“Tenemos que tener con los pies en el suelo, sabemos que va a ser complicado mantenerse en esta categoría. El ascender a Segunda División no por nuestra cabeza, es que estamos hablando de otro nivel”. En esta ocasión, la ilusión del municipio es volver a disfrutar del deporte con su gente: “200 personas sentadas y otras tantas decenas de pie. El COVID le sucede a todo el mundo, pero es una pena que quienes nos han apoyado no puedan vivir el momento”.

El polideportivo, antes del coronavirus / Foto: Gustavo Sáenz

El deporte como semilla de futuro

Víctor Manuel Rada (PP) es el alcalde del municipio: “El equipo es un orgullo para todos los queleños, porque proyectamos la imagen del pueblo y de toda la región. Es una manera de comenzar con algo, aquí no hay ningún otro deporte y todo el mundo está volcado. La villa del Pan y el Queso, con 2.000 habitantes; mantiene su nivel de población a pesar de la tendencia general de la comarca: “Quiero que la gente sepa que aquí se puede vivir en un pueblo, practicar un deporte y crecer de muchas maneras.

“Detrás de cada triunfo hay mucho trabajo y entrenamiento; hay que agradecer el compromiso de la directiva, cuerpo técnico y jugadores. Estos deportistas son ejemplos para los niños, que ven como el trabajo y el esfuerzo tienen recompensa”, explica. Un desempeño para el que hay se está sembrando: “Antes se jugaba mucho a pelota mano y hace años, sí que hubo equipo de fútbol, íbamos al campo y lo pasábamos muy bien. Un nuevo campo podría ser un proyecto de futuro, pero para eso necesitamos gente que juegue”.

Foto: La Rioja Turismo

En este sentido, recuerda la construcción del polideportivo como el punto de partida: “Me siento muy orgulloso, se construyó el pabellón y polideportivo para que sucedieran este tipo de situaciones. Se creó el equipo gracias a ello: ahora es futbito, pero luego pueden ser otro tipo de deportes. El Ayuntamiento está abierto a todo y además, apoya al Villa de Quel mediante una subvención nominativa para los desplazamientos”.

Por otro lado, el regidor anuncia que el polideportivo permitirá la presencia de público en los próximos partidos: “Vamos a cumplir todas las medidas de seguridad, pero se va a dejar entrar a nuestra afición con las medidas correspondientes”.

Subir