El Ministerio de Sanidad y la Comunidad de Madrid han alcanzado este martes un principio de acuerdo sobre el control de la pandemia en dicha comunidad autónoma. Entre los términos acordados, destaca el establecimiento de un criterio uniforme para aplicar restricciones en las localidades de más de cien mil habitantes afectadas por el COVID-19.
En La Rioja solo la capital autonómica cuenta con una población superior a los 100.000 vecinos, pero sus datos epidemiolóticos le permiten ‘librar’ de medidas especiales en cuanto a movilidad. Porque, según ha explicado el ministro Salvador Illa, deberán aplicarse restricciones en las localidades que cuenten con una incidencia acumulada superior a los 500 casos, donde la tasa de positividad (porcentaje de positivos entre todas las PCR realizadas) se eleve por encima del 10 por ciento y donde las UCI tengan una ocupación superior al 35 por ciento.
En el caso particular de Logroño, y según los datos epidemiológicos de este mismo martes (facilitados por el Gobierno de La Rioja), la incidencia acumulada se sitúa prácticamente a la mitad del umbral fijado por Sanidad, con 279,9 casos por cada cien mil habitantes. También juega ‘a favor’ de la capital riojana la ocupación de la UCI del Hospital San Pedro, que este martes es del 33,9 por ciento (muy cerca, eso sí, del límite de Sanidad).
El único de los tres factores que no cumple Logroño actualmente es la tasa de positividad, que según el último boletín epidemiológico del Ministerio es del 10,8 por ciento, es decir, ocho décimas por encima de lo establecido por el Ministerio.
