La figura de los ‘rastreadores’ ya se ha expandido por toda la geografía nacional con el fin de establecer el número de contagiados por cada paciente positivo en COVID-19 tres o cuatro días antes de producirse los síntomas para poder aislarlos. La Rioja cuenta con 85 de estos trabajadores, lo cual supone un rastreador por cada 3.706 habitantes. Mientras, la media nacional se sitúa en uno por cada 12.000 habitantes.
Sin embargo, el último informe publicado por el Ministerio de Sanidad refleja un escaso número de personas identificadas por cada contagio, solo tres contactos por cada contagio de COVID-19 de media. Lideran la lista las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla, con seis y once localizados de media por cada caso, respectivamente; Canarias, que también logra localizar a seis por cada caso; y Andalucía, Navarra y Extremadura, con cinco contactos localizados. La Rioja se sitúa casi a la cola con dos.
Dicho informe, donde se analizan los 23.000 casos notificados por las comunidades autónomas entre el 11 de mayo y el 15 de julio, evidencia el significativo repunte desde el final del estado de alarma, así como el peligro de transmisión comunitaria. Es La Rioja, entre otras regiones, una de las comunidades donde se aprecia también un aumento de la incidencia acumulada.
La portavoz adjunta del PSOE en el Parlamento, Sara Orradre, ha celebrado ese martes los datos de rastreadores en la región, que “convierten a la comunidad en la única, junto con Castilla La Mancha, que mejora el umbral óptimo de un rastreador por cada 5.500 habitantes, contado con la posibilidad, además, de ampliarse en el caso de La Rioja”.
Orradre ha hecho alusión también a la realización de pruebas diagnósticas que sitúan a La Rioja como la cuarta comunidad con más test PCR realizados hasta el pasado 16 de julio, mientras que la media nacional en España sitúa el número total de PCRs por cada mil habitantes en 81,73. En el caso de los ‘test rápidos’, La Rioja solo es superada por Castilla y León.
La diputada socialista ha señalado que, “en cualquier caso y a pesar de los esfuerzos de la administración riojana en el control y aislamiento del virus, sigue siendo necesario hacer un llamamiento a la responsabilidad individual, ya que nada de esto servirá de nada si no se siguen de forma escrupulosa el cumplimiento de todas las medidas sanitarias necesarias para evitar la propagación”.
