Poco a poco y después de la tormenta del COVID-19 que ha arrasado con todo a su paso, La Rioja va cumpliendo a tiempo con los requisitos que permiten avanzar de fase hasta ahora cada quince días.
Las terrazas, los bares, los comercios… la mayoría van recuperando una relativa normalidad que hace que los riojanos podamos disfrutar de actividades que tanto echábamos de menos después de dos meses de confinamiento. Entre otras muchas, las salidas al monte y la vuelta a la naturaleza ha sido una de las medidas más celebradas por todos. Hacía falta recargar pilas con el buen tiempo y el aire fresco.
Las Pozas de Arnedillo son uno de los escenarios naturales de La Rioja por excelencia. Estas construcciones de piedra en el río Cidacos son visitadas a lo largo de todo el año por oriundos y turistas. Invierno o verano, da igual, las aguas termales con propiedades medicinales y el disfrutar de un baño pudiendo disfrutar de las vistas, apetece siempre.
La pandemia sanitaria en la nos hemos visto envueltos ha restringido el acceso a esta maravilla natural, pero en la Fase 2 en la que nos encontramos ya podemos disfrutar de las pozas. Eso sí, respetando unas normas básicas: solo se permite cuatro personas por poza, separados siempre por dos metros de distancia y permaneciendo dentro 15 minutos máximo.
Este sábado, los atrevidos al baño han sido los menos, pero numerosas personas han aprovechado el tiempo para pasear por la zona y andar en bici.
