El consejero de Educación, Luis Cacho, ha comparecido en rueda de prensa para aclarar que, una vez alcanzada la ‘Fase 2’, la práctica educativa se iniciará el martes 26 de mayo para todos los alumnos que necesitan actividades de recuperación y apoyo y para los que se enfrentan a retos académicos más exigentes como la preparación de la EBAU o cursos finales de etapa.
Cacho ha señalado que esta ‘vuelta al cole’ será voluntaria tanto para alumnos como para docentes. Asimismo, la educación a distancia continúa. “Ha sido un gran logro, pero la presencial es un recurso necesario para cuando la educación a distancia no es suficiente”.
Además, el consejero ha aclarado que los términos de ‘persecución’ y ‘ataque’ hacia la concertada “no se corresponde a la realidad”. “No hay ningún plan ideológico contra la educación concertada, sino un procedimiento de oficio de modificación de conciertos y de unidades en función de su grado de ocupación. Todo para mantener un equilibrio entre la pública y la privada”. Un reajuste necesario, tal y como lo ha definido Cacho, ya que la demanda social de los servicios educativos varía en el tiempo.
Por otra parte, ha pedido un voto de confianza para lograr un equilibrio entre los dos sistemas. “Se había perdido tras unos años a favor de la educación concertada, creando una situación de baja ocupación en la concertada injusta frente al sistema público. No es algo que nos hayamos inventado. Se realiza en todas las comunidades educativas con los mismos criterios”.
Luis Cacho ha señalado que la propuesta del Gobierno pasa por la reducción de diez unidades y la creación de tres nuevas, produciéndose así un saldo negativo de siete. Cifras que hay que valorar respecto al volumen total de unidades. “Más de seiscientas, lo que nos da un porcentaje de unidades suprimidas de un uno por ciento, algo que no se puede considerar un ataque ni política premeditada, sino un mecanismo de saneamiento de las unidades con menos ocupación de alumnos”.
El consejero de Eduación ha asegurado que “ningún alumno va a perder su plaza. La libertad de elección del centro está garantizada y nadie está excluido de poder escolarizarse en el centro que quiera, eso sí, hay unos límites de gestión pública que es la capacidad de cada centro”.
En cuanto a las ratios, Cacho ha hecho hincapié en que “no se han elevado las de las concertadas, solo se han equiparado al sistema público. Hemos reducido unidades cuya ratio está en torno a la mitad de la media pública. El sistema está lo suficientemente desequilibrado y por eso actuamos de oficio”.
