Las cigüeñas del Parque del Ebro deben andar algo confusas en los últimos días. Más allá de apreciar a menos personas (alguna queda saltándose el confinamiento de forma más o menos disimulada) transitando las calles de Logroño, al revolotear el entorno de Madre de Dios cada mediodía deben alucinar en colores.
Porque cada día, de forma puntual, el vecindario se asoma a sus ventanas para romper en aplausos. Y no es para reconocer al personal sanitario que planta cara al coronavirus, que también. La ‘culpa’ la tiene una joven que encandila a sus vecinos con la música de su violín.
Su nombre es Aitana Rosón y suya es la banda sonora de un barrio alegre como pocos en la capital riojana. Cuando dan las doce, Aitana se asoma al balcón y se topa con un buen puñado de vecinos esperando el recital de cada día. Todo surgió cuando vio en Instagram una inicitativa que invitaba a los músicos a regalar sus melodías a los conciudadanos a esa misma hora. “La idea original era interpretar las piezas que sube ese perfil a diario, pero como siempre me ha gustado tocar y sacar de oído canciones, pues me decanté por hacer yo la elección de las canciones que yo quisiese”.
Así, quienes viven cerca del número 50 de Madre de Dios disfrutan de piezas populares, como la tarantela del vídeo, pero también otras canciones más modernas, como el ‘Cómo te atreves’ de Morat, el ‘No dudaría’ de Antonio Flores’ o el himno de esta cuarentena: el ‘Resistiré’ del Dúo Dinámico.
“Mi padre (Chema Rosón) colabora conmigo y Sara, una amiga pianista, me manda grabaciones colaborando, para que sea como si tocáramos juntas”, explica la joven música, detallando que “mi idea es pedirle también a los vecinos en esta semana que si tienen alguna petición, me lo digan y tocarla. Todavía no lo he hecho pero sería bonito tocar sus canciones favoritas”.
Y es así cómo cada mañana, Aitana y su violín revolucionan la cuarentena del vecindario de Madre de Dios, que ya sabe que puede pedir canciones ‘a la carta’.
