Ya es oficial. La Vuelta 2020 tiene recorrido y La Rioja va a disfrutar de lo lindo con el ciclismo del más alto nivel. A la salida en Logroño y la llegada en Moncalvillo ya conocidas, se ha unido este martes la presentación oficial de todas las etapas. Y en dos de ellas, la región será protagonista. “¿Cómo harán para ir desde la capital riojana hasta el alto?”, se preguntaban los aficionados estos días. Ya hay respuesta.
En la undécima etapa (26 de agosto), comienzo llano desde Logroño para pasar por San Asensio, Nájera, Sotés, Navarrete, Lardero, Ribafrecha, Soto en Cameros, puerto de La Rasa, Torrecilla, Panzares y Moncalvillo.
“La primera parte, mayoritariamente llana, se desarrollará por la zona de los viñedos de Logroño. El paso por el puerto de La Rasa (2ª) causará cierto desgaste pero el final – inédito – se decidirá en el Alto de Moncalvillo, un puerto sorprendente, exigente y más duro de lo que parece: tendido, con rampas de entre 8-9% con tres últimos kilómetros al 13-14%. A estas alturas de La Vuelta cualquier pérdida de tiempo es crucial de cara a la general”, ha explicado Fernando Escartín.
Una semana antes, en la sexta etapa (20 de agosto), el protagoniso riojano estará en Pradejón, Arnedo, Arnedillo y Enciso. “Las diferencias en la clasificación general empezarán a permitir las primeras fugas con opciones de victoria. La llegada, inédita en La Vuelta, es para corredores fuertes, si bien todo dependerá del control que ejerzan los equipos de los gallos sobre las fugas. La meta está en la cima de un puerto de 1ª en el que las diferencias serán previsiblemente mínimas”, ha indicado Escartín.
