El Anguiano está firmando un gran inicio de temporada y es el líder de la Tercera riojana. Con 18 puntos, los riojanos acumulan cuatro victorias consecutivas y tienen buena solvencia tanto ofensiva como defensiva. Todo va viento en popa en el peculiar campo de Isla. Entre altas montañas y verdes prados se desarrolla una bonita historia futbolística.
Adrián Gallego desembarcó en el banquillo serrano durante el pasado verano, procedente del Valvanera, con el que ascendió a División de Honor y se mantuvo en la máxima categoría juvenil: “Sentí que mi ciclo había acabado, ya conocía al Anguiano porque jugué allí y además era convenido del Valvanera. Es un club familiar que te deja trabajar y no te presiona desde el principio para estar arriba”.
El técnico confeccionó una plantilla unida y para él, eso explica el actual rendimiento: “Hemos conseguido hacer grupo con una buena mezcla entre los que han venido y entre los jóvenes y los veteranos que ya conocen la categoría”. En definitiva, un proyecto sin tantas urgencias: “Tampoco nos habíamos generado ilusiones en pretemporada, trabajábamos día a día y las expectativas a largo plazo nos las hemos sacado de la cabeza”.
La filosofía del partido a partido les está saliendo bien a los anguianejos. En la pasada jornada vencieron por 0-5 al Calasancio. Nunca es fácil vencer así en La Estrella: “Siempre vamos con mucho respeto a campos así, los rivales trabajan mucho, te ven y saben como juegas”. En esa línea, expresa su satisfacción por dicha victoria: “Todos los jugadores han entrenado bien y estamos contentos por sacar un resultado amplio. El equipo se lo mereció desde el principio, dominamos el partido y fuimos ambiciosos”.
Fuente: CD Anguiano
Un equipo con múltiples posibilidades
En cuanto a estilo de juego, Gallego tiene las ideas muy claras: “Intentamos ser un equipo polivalente. Queremos sentirnos cómodos en ataque combinativo, pero también en el juego directo”. El técnico desarrolla su planteamiento en base al contexto muy variable de la categoría: “En la Tercera riojana hay que adaptarse siempre a los campos y a los rivales, porque todos son diferentes. A día de hoy lo estamos haciendo bien y estamos contentos”.
Su próxima cita es un encuentro por todo lo alto, ya que reciben al Náxara. Sin embargo, desde el club se lo toman con bastante calma y un punto de ilusión: “Es una jornada más, pero a todo el mundo le gusta jugar este tipo de partidos, en casa, con nuestra afición y frente a un equipo que no ha podido ganarse en los próximos años”. En la misma línea, explica que no quiere marcarse objetivos de cara a la jornada 38: “No miramos el más allá; creo que si trabajamos y hacemos bien las cosas, estaremos más arriba”.
Los valores que transmite este club son especiales y van más allá del dinero: “Económicamente estamos muy por debajo de equipos como Náxara y SD Logroñés”. Por último, valora sus virtudes y las aprecia por encima de cualquier otra cosa: “Tenemos un grupo muy homogéneo, con jugadores de mucha calidad y muy competitivos. Estoy muy contento y a día de hoy no cambiaba ni mucho menos mi equipo por ninguno de esos dos”.
