La Rioja

El juez autoriza la salida de dos etarras ingresados en la cárcel de Logroño

El juez José Luis Castro ha autorizado esta semana a los etarras Javier Aguirre Ibáñez y Marta Igarriz Iceta a abandonar la cárcel de Logroño, donde cumplen condena, para realizar una visita cultural, tras la cual regresarán a su celda ese mismo día.

El diario ABC ha accedido a los autos en los que el juez autoriza la salida programada de los reclusos, que en todo momento deberán estar acompañados y vigilados. En ellos, Castro accede al criterio de la junta de tratamiento de la cárcel de Logroño, que cree que esta visita ayuda a “consolidar su evolución positiva”.

Tanto Aguirre como Igarriz han condenado la violencia y han reconocido el daño causado a las víctimas, hechos que subrayan los autos del juez de la Audiencia Nacional. La Secretaría General de Instituciones Penitenciarias denegó la solicitud de esta visita el pasado 23 de septiembre, si bien ahora Castro ciñe esta actividad como específica de tratamiento para facilitar el tránsito ha reinserción.

Javier Aguirre -ingresado en Logroño desde el pasado mes de febrero- cumple seis años y medio de condena por apoyarse en ETA en su huida de la justicia española, refugiándose en Bélgica. En cuanto a Marta Igarriz, cumple una pena de quince años por alojar en 2004 en su casa a tres etarras del comando Amaiur  y guardar una mochila con explosivos. Hace un año fue trasladada al penal de la capital riojana hace un año.

El arrepentimiento

Ambos condenados por colaborar con ETA han escrito sendas cartas para pedir perdón a las víctimas. En la de Aguirre -tal y como recoge ABC- indicaba que “espero que este inequívoco reconocimiento pueda servir en la medida de lo posible para atenuar el sufrimiento generado a las víctimas. Víctimas ante las que de ningún modo me muestro indiferente, ya que no soy ajeno al dolor y sufrimiento que han padecido”.

Igarriz, por su parte, relataba en su misiva que “soy consciente, que bien por mis actos o expresiones, he podido causar daño y dolor a otras personas, por lo que reconozco de forma sincera el daño que pudiera haber causado, y mi decisión de trabajar para que no se vuelvan a producir situaciones similares”.

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