El Partido Riojano ha pedido este martes a la presidenta del Gobierno de La Rioja, Concha Andreu, que exija “una rectificación inmediata a Adif para que vuelva a considerar a las estaciones riojanas como estratégicas”.
Los regionalistas señalan que es lamentable que Adif, órgano dependiente del Ministerio de Fomento, elimine a las estaciones riojanas de la categoría de estratégicas “justificándolo en una bajo número de pasajeros, cuando es el Gobierno central el responsable directo del bajo número de trenes y pasajeros, al aislar a La Rioja durante años de las inversiones necesarias para formar parte del tren de alta velocidad o, cuando menos, unas conexiones razonables con el resto del país”.
El presidente de la formación regionalista ha alertado de que “en tan solo unos días, nos han asilado por tren y avión: primero, con la desaparición de la única conexión aérea con Madrid y, ahora, con hacer descarrilar a nuestra comunidad autónoma como estratégica en las conexiones ferroviarias, lo que, sin duda, penalizará en las inversiones de presente y futuro en materia de cercanías, media distancia y mercancías”.
El Partido Riojano ha recordado que “durante los últimos años de Gobiernos del PSOE en Madrid, el Ministerio de Fomento ha incumplido sistemáticamente las inversiones anunciadas, tanto en ferrocarril como en carreteras, ante el silencio de las sucursales riojanas de ambas formaciones, que solo elevan la voz cuando no gobiernan”.
“Abandonar la sumisión”
Rubén Antoñanzas ha manifestado que “el Gobierno central debe rectificar de inmediato, el nuevo Gobierno de La Rioja debe ser reivindicativo y abandonar la sumisión de los últimos años”. El presidente regionalista ha preguntado al Ejecutivo regional “si conocían de antemano la decisión de Adif y, en tal caso, si plantearon alegaciones, o si ni tan siquiera Adif comunicó su decisión”.
El líder regionalista ha destacado que “Concha Andreu tiene que demostrar su compromiso con los riojanos, no puede hacer lo mismo que hicieron Pedro Sanz y José Ignacio Ceniceros, que fue callar y no molestar en Madrid”.
