Tic, tac. Septiembre ya está a la vuelta de la esquina. El reloj comienza a correr y los tiempos de la política riojana se aceleran. La candidata del PSOE a la Presidencia, Concha Andreu, ha recibido la segunda negativa del Parlamento en 48 horas. Los votos de PP, Ciudadanos y Podemos han tumbado su investidura como líder del Gobierno de La Rioja para los próximos cuatro años.
Pese a las negociaciones ‘in extremis’ de miércoles y jueves, las posturas tan alejadas de PSOE y Podemos han sido irreconciliables. Por tanto, diecisiete votos en contra y dieciséis a favor. Insuficientes. Sin sorpresas de última hora, la decisión de Raquel Romero se ha mantenido inamovible. “Sin consejerías, no hay investidura”, han manifestado en la reunión horas antes de la sesión. Y como no ha habido posibilidad de entrar en el Consejo de Gobierno sino el ofrecimiento de dos viceconsejerías y una dirección general, no ha habido investidura.
El apoyo del PSOE e IU no ha servido para que La Rioja tenga gobierno y se abre ahora un plazo de dos meses para que los grupos políticos se pongan de acuerdo. Abierta a negociar con diferentes fuerzas, Andreu podría optar por hablar en exclusiva con Ciudadanos (sumarían diecinueve escaños o valdría su abstención), así como reeditar un intento de acuerdo con Henar Moreno (IU) y Raquel Romero (Podemos).